India esta presenciando un aumento de grupos para-policiales, el más notable es el gulabi, o "pandilla rosa", que opera en uno de los distritos más pobres de la India. Algunas pandillas han comenzado lo que los periodistas hindúes describen como una "mini-revolución" femenina. El gulabi, cuyos miembros dicen que son una banda "de justicia", se inició en 2006 como una hermandad que ayuda a las víctimas de violencia doméstica, un problema que las Naciones Unidas estima que afecta a dos de cada tres mujeres hindúes casadas.