Estaba el otro día en un bar presenciamos una escena espeluznante. Un joven discutía con el propietario del establecimiento porque se negaba a pagarle 10 euros por un plato cuando sólo le había pedido una tapa para picar algo. El asunto subió aún más de tono y, en un periquete, el ventero con instintos asesinos saltó de la barra, esta vez con un afilador de cuchillos tamaño XXXL y acabado en punta y asió al cliente por la camisa, pinchándole en el estómago mientras que le gritaba fuera de sí que le pagara los 10 euros...
Comentarios
Buenas ... ¿me da una Mirinda?
Me sangran los ojos, ¿Habéis visto el..? ¿Eso es un banner?
Hielo en la cerveza?!?!?
A mí, desde le momento que sueltan el "No se llamó a la policía ni se amenazaron con denuncias. ", me flipan. Eso les incluye a ellos como espectadores, que al aprecer prefirieron ahorrarse la molestia de tener que telefonear desde la esquina y esperar al coche patrulla. Que luego se pongan dignos con el civismo me alucina porque es una obra de arte del doble rasero.
Jarra de Cerveza en la sierra de Cadiz... con dos hielazos en la jarra --->10 euros
¿que diablos haces, te largas, o le pides una foto?
Meneo por lo curioso de la anécdota, pero me parece muy atrevido extrapolar este comportamiento a toda la sociedad cuando sólo fue un caso aislado.
"ventero" (en un uso poco acertado), "asir", vaya derroche de palabros...
El mineralismo va a llegar
Pues a mi nada. Al del bar habría que darle unas clases de educación, y al cliente también.
#1 Hombre, lo del bar es una anécdota, el artículo profundiza un poco más en otras cosas. Curiosamente, unos días después de que se escribiera, sucedió lo de las fiestas de Pozuelo...