A diario, cuando enciende su ordenador, probablemente revise si ha recibido algún mensaje en un su cuenta de correo electrónico. Quizá incluso disponga de varias, una personal, otra de su trabajo... Pero, ¿qué sucede con esta huella digital cuando fallecemos? Tal vez se pregunte si su heredero podrá acceder a esta información y, en caso afirmativo, cuál es el camino que debe seguir.
Comentarios
Dentro de unos años internet se acabará llamando "porno". Tiempo al tiempo.
#1 ¿Es eso lo que se te ocurre en cuanto a herencia digital? jajajaj
En ese caso yo llamaría al monstruo de las galletas para que se comiese todas las cookies