La Guardia Civil de Tráfico sorprendió el domingo al empleado de una funeraria circulando con una furgoneta de la empresa a 187 kilómetros por hora en la autovía A-66, en el término municipal de Mozárbez. El conductor fue interceptado después de que los agentes comprobaran que rebasaba la velocidad permitida en la autovía, que en su caso como máximo es de 90 km/h.
Comentarios
No creo yo que el "cliente" tuviese mucha prisa.
A lo mejor es que empezaba a oler.
Y en el reproductor sonaba "Highway to hell" a todo volumen
la descomposicion no perdona hay que llegar rapido
Hay gente que no quiere llegar tarde a su funeral.
Llegaría tarde al entierro.
Pa haberse matao....
Salu2
Ni después de muerto se acaba con el estrés