El maltrato y robo de arte durante los disturbios egipcios de este mismo año sirvió para advertirnos de la indefensión del patrimonio cultural de un país ante sus cambios políticos. Cincuenta y cuatro obras desaparecieron tras las protestas, recordando a otros tristes episodios históricos que el tiempo ha convertido en mito.
Comentarios
En las ciudades históricas, la mayoría de esculturas son réplicas y las reales están a buen recaudo en museos.
O eso, o lo que yo siempre digo y no me hacen caso, ponemos francotiradores y a ver quién tiene huevos a tocar algo.