Corrían los años 40 cuando una jovencita Allie Hamilton se traslada con su familia a Seabrook para pasar allí el verano. Un día, un apuesto muchacho de origen humilde llamado Noa pasea por la feria del pueblo cuando una aguda y vivaracha risa llama su atención. Hasta aquí no les cuento nada nuevo, efectivamente, hablo de El Diario de Noa. Lo que les propongo a continuación es hacer un revisionado de la película desde el punto de vista de la bioquímica.
|
etiquetas: bioquímica , sexo , amor , drogas , cine