Hace 17 años | Por josval a elmundo.es
Publicado hace 17 años por josval a elmundo.es

Parece que se ha terminado el chollo de las revalorizaciones perpetuas, en las que el ofertante (no el demandante) va fijando los porcentajes anuales de revalorización de bienes tangibles diversos:sellos, pinturas, esculturas, muebles antiguos. Un sistema que funcionaba porque el nuevo cliente asumía dichas revalorizaciones, sin pararse a pensar, que de sacar, sus lotes, de sellos, pinturas, esculturas o alcornoques, al mercado, este fija el precio según múltiples circunstancias y no al albur del emisor. Lo siento de veras por los afectados.