Algo ha ido muy mal en Gaza. La guerra de Israel se ha convertido en muerte y destrucción a escala bíblica. La mayor parte de Gaza yace en ruinas, millones de civiles están desplazados y decenas de miles han muerto. Y aun así, el primer ministro de Israel, Binyamin Netanyahu, no puede contenerse. Esta semana se ha sabido que quiere ocupar toda Gaza. Pero Hamás ya no es una amenaza militar, por lo que la guerra ya no tiene estrategia y seguir luchando ya no es justo. Peor aún, el gobierno de Israel, a pesar de sus obligaciones como potencia ocup