La verdad es que me alegro mucho que se haya descubierto el pastel...
Sólo pensar que un organismo oficial pudiera elogiar a una ministra que indultó a una mujer que seguestró a sus hijos e impidió el contacto del menor con su padre, elemento reconocido en la declaración Universal de derechos humanos, me quitaba toda esperanza en la.humanidad...