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Sobre las noticias y las historias falsas. Una retrospectiva

Decía Oswald Spengler en su enciclopédica obra sobre la decadencia de Occidente, que hasta el siglo XVIII no hubo intento alguno de escribir la historia de un modo objetivo, tratando de conocer realmente los hechos que en su momento habían sucedido. Fue el despertar del pensamiento científico el que trajo esta novedad que hoy creemos imprescindible, y a mucha gente de la época le sorprendió enormemente que los estudiosos y eruditos trataran de bucear en piedras, inscripciones y papeles antiguos que, por entonces, no tenían ningún valor. La arqueología fue también un invento del romanticismo, no lo olvidemos.

La gracia de esto, en primer lugar, reside en que estoy mencionando a Spengler porque creo sinceramente haberlo leído en ese libro suyo, pero me queda la duda de si lo leí en una obra de Toynbee, o incluso de Keegan. No me atrevo a asegurarlo.

Cuento esto porque creo que ilustra bastante bien la amplitud del tema. Estoy convencido de que es cierto que la historiagrafía moderna empieza con el enciclopedismo y el nacimiento del pensamiento científico, y no es muy relevante si en mi caso lo aprendí de Spengler, Toynbee o Keegan. Pero para alguna gente puede ser importante y, si me usara como fuente (mala idea), mi posible error se va a transmitir y a agrandar. ¿Intento engañar? No. Me equivoco, simplemente. Y me da pereza comprobarlo, porque no le otorgo al asunto la importancia que puede tener para otros.

Este es el primer problema de los errores: los que provienen de la mala memoria, el descuido, o la pereza. No son engaños, porque no hay intención de falsear nada, pero son errores.

Sin embargo, lo peor está en el aserto inicial. Si hasta el siglo XVIII nadie tenía el menor interés en averiguar los hechos, ¿quién demonios escribía las crónicas que hoy tomamos como fuentes fidedignas? Pues los que recibían el encargo de hacerlo o tenían algún interés en ello, que viene a ser como decir, los que contaban con motivos propios para sesgar, retorcer, falsificar, o seleccionar interesadamente los hechos.

También esto lo leí, pero no voy a arriesgarme con la fuente: todo lo que sabemos del pasado lejano con cierta exactitud se debe a pruebas distintas de las escritas, porque de lo escrito es inútil fiarse. Sabía escribir muy poca gente, y escribía para los poquísimos que sabían leer. El proceso, muy costoso, no se llevaba adelante por entretenimiento, amor a la verdad, o deseo de acumular conocimiento histórico (también eso es una idea moderna). El que escribía una crónica, lo hacía por encargo, para hacer propaganda de algo, o por el interés de su patrón, que a menudo necesitaba legitimidad, perdón o reconocimiento.

Puede haber excepciones, por supuesto, y algunos mencionan a Heródoto entre ellas, pero ni de eso podemos estar seguros, ya que tampoco resulta inverosímil pensar que intentaba afianzar ciertas legitimidades contra las pretensiones de alguien opuesto.

De los Evangelios supongo que es mejor no hablar.... Lo mismo que de los demás libros religiosos, sin excepción alguna.

Así que, ¿qué nos queda para conocer realmente la historia? Facturas, ruinas,enterramientos, algún acta de algún proceso judicial, contratos, cartas entre particulares y testamentos.

Pero por favor, no nos hagamos los sorprendidos con que la gente falsea los hechos, porque lo raro, lo inaudito es nuestra pretensión de que no se haga.

La anomalía son estos tres siglos en los que hay gente que trata de saber lo que pasó en realidad... Aunque sea dando por buenas las milongas rancias que contaron los mentirosos del pasado.

Qué le vamos a hacer: la Humanidad es eso.

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La responsabilidad penal de las personas jurídicas y la condena al Partido Popular

Este artículo surge de una deuda contraída con el usuario @Pérfido, el cual correctamente me comentó la existencia de responsabilidad de las personas jurídicas en el derecho penal español. El tema es muy extenso y solamente me limito a explicar de manera somera la introducción de esta nueva responsabilidad en nuestro derecho penal. Así como a explicar que el PP no fue condenado como responsable directo penalmente.

Si me ha salido un artículo ininteligible, lo siento, mi intención era aportar algo de luz para que cada usuario pueda hacerse un juicio más real sobre el tema. La materia no es precisamente clara. Mi esfuerzo espero que lleve a cualquiera a realizar sus matizaciones, comentarios, y lo que estime preciso.

Todo este artículo tiene como origen un comentario que hice en el siguiente artículo:

www.meneame.net/story/condena-isa-serra-atestado-policial-murciano-inv

En el artículo uno de mis comentarios dice que el PP no puede considerarse un partido criminal, sino que los criminales son algunos de sus miembros. Ahí fue donde @Pérfido me hizo ver que el PP había sido condenado como persona jurídica. Lo cual es totalmente cierto, aunque con algunos matices.

Leyendo un poco sobre el tema puedo decir que el PP fue condenado como responsable civil, conforme al artículo 120 del Código Penal. Esto podemos verlo en la sentencia de Gürtel, donde se condena al PP como responsable civil a pagar una suma de dinero:

e00-elmundo.uecdn.es/documentos/2018/05/24/sentencia_gurtel.pdf

Ahora analicemos de manera somera la responsabilidad penal de las personas jurídicas en nuestro sistema normativo. Porque sí es cierto que existe dicha responsabilidad en España desde el año 2010.

Es muy conocido el brocardo Societas delinquere non potest el cual condensa o resume una regla jurídica muy extendida en el derecho continental europeo, y conforme a la cual las sociedades carecen tanto de capacidad delictiva como de capacidad para cumplir una pena.

Esta regla ha estado presente en el derecho continental europeo, no así en el derecho anglosajón donde se reconocía la capacidad delictiva de las sociedades, y donde se las podía juzgar y condenar penalmente.

Nuestro Código Penal en vigor, que data del año 1995 (con múltiples parches), recogía la tradición jurídica continental y por tanto excluía a las personas jurídicas de la responsabilidad penal. Nuestro Código Penal reconocía de manera muy leve algunas consecuencias penales, como son la clausura definitiva o temporal de una empresa, la disolución de una sociedad, el cese de actividades, así como la responsabilidad civil derivada de la comisión de un delito.

No dejaban de ser consecuencias accesorias de los delitos cometidos por sus miembros, y no un reconocimiento de la capacidad delictiva de una organización, ni de su capacidad para ser sujeto de una pena principal.

Años antes, en 1988, el Comité de Ministros del Consejo de Europa había dictado una recomendación exhortando a los países miembros a introducir en su legislación penal la responsabilidad de las personas jurídicas.

En el año 2010 se produce una reforma del Código Penal donde se introduce la responsabilidad penal de las personas jurídicas en nuestro sistema normativo. Obedeciendo por un lado al derecho internacional, que marcaba el paso en esta dirección, y por otro lado obedeciendo al sentir social que cada vez mostraba menos tolerancia con los crímenes cometidos por empresas principalmente en su actividad económica.

Esta reforma fue introducida durante el mandato de Jose Luís Rodríguez Zapatero.

La reforma fue considerada por un amplio sector doctrinal como confusa, y fragmentaria, pudiendo dar lugar a una doble interpretación. Por un lado había quien entendía que la responsabilidad penal de la persona jurídica era consecuencia de la responsabilidad de sus miembros, es decir, habría una transferencia de responsabilidad por hechos ajenos. Por otro lado se entendía que la persona jurídica era directamente responsable al no prevenir conductas delictivas dentro de la propia organización.

Cinco años más tarde, y con escasa jurisprudencia al respecto, se produce una nueva reforma del Código Penal modificando los artículos referidos a la responsabilidad penal de las personas jurídicas. Esta vez es el gobierno de Mariano Rajoy el que impulsa la modificación.

Según el preámbulo de esta nueva modificación no se pretende cambiar la regulación de la responsabilidad penal de las personas jurídicas sino aclarar todas las dudas interpretativas que habían surgido con la reforma del año 2010.

Se decanta claramente el legislador por la interpretación en que la persona jurídica es directamente responsable al no haber ejercido un debido control de las actuaciones de sus representantes, dejando atrás la interpretación que consistía en la mera transferencia de responsabilidad por hechos ajenos, aunque conserva todavía algunos supuestos de transferencia de responsabilidad.

Se instaura por tanto una responsabilidad penal directa en algunos casos y se mantiene la transferencia de responsabilidad en otros.

El artículo del Código Penal donde se regula es el 31 bis, que dice lo siguiente:

Artículo 31 bis
1. En los supuestos previstos en este Código, las personas jurídicas serán penalmente responsables:
a) De los delitos cometidos en nombre o por cuenta de las mismas, y en su beneficio directo o indirecto, por sus representantes legales o por aquellos que actuando individualmente o como integrantes de un órgano de la persona jurídica, están autorizados para tomar decisiones en nombre de la persona jurídica u ostentan facultades de organización y control dentro de la misma.
b) De los delitos cometidos, en el ejercicio de actividades sociales y por cuenta y en beneficio directo o indirecto de las mismas, por quienes, estando sometidos a la autoridad de las personas físicas mencionadas en el párrafo anterior, han podido realizar los hechos por haberse incumplido gravemente por aquéllos los deberes de supervisión, vigilancia y control de su actividad atendidas las concretas circunstancias del caso.

El juicio de Gürtel se circunscribe a hechos delictivos cometidos con anterioridad al año 2010, que como ya expliqué es el año en que se introduce la primera modificación en nuestro Código Penal a este respecto, y por lo tanto no pueden juzgarse los hechos con el nuevo Código Penal sino con el viejo Código Penal, donde las personas jurídicas no son consideradas como sujetos con capacidad de delinquir ni de asumir las penas correspondientes.

Es por ello que se condenó al PP como responsable civil, y no como responsable penal.

Espero que este artículo ayude a entender un poco un caso tan endiabladamente enrevesado, y nos ayude a la hora de analizar determinadas informaciones referentes a las leyes penales.

También quiero dejar constancia de la existencia de la llamada Ley de Partidos, conforme a la cual se pueden ilegalizar partidos políticos, como se hizo con Herri Batasuna, que aunque tenga relación con el tema creo que difiere en algunos puntos, pero es conveniente señalar también su existencia, al tener cierta relación con el tema principal.

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Hamlet para el banco del parque

Hamlet para el banco del parque

Vivir o morir, es la duda.

¿Qué es más digno, sufrir la injusticia o acabar con todo y terminar con tu desgracia?

¿Será morir como dormir?, ¿será como soñar?, ¿se acabará en ese sueño el dolor típico de la debilidad humana?

¿No sería un buen final? Que morir sea como dormir, que sea como soñar.

Pero es también el problema: que soñar en el silencio de una tumba y sin cuerpo que despierte... quizá sea una buena razón para no desear morir.

Ese es el temor que hace nuestras vidas infelices tan largas. Si no fuera por eso, ¿quién aguantaría a los poderosos, los tribunales, la chulería, la violencia, que te rompan el corazón o que te tienten la paciencia... pudiendo rajarte tú mismo con cualquier cuchillo?

¿Quién cargaría con tanta mierda, quejándose y sudando por el peso de la vida, si no fuese por el miedo a lo pueda haber después? Ese sitio sin retorno, que nos vuelve tan locos como para acabar prefiriendo siempre lo malo conocido que lo bueno por conocer.

Pensar en eso nos hace cobardes, estropea cualquier iniciativa. Y así, incluso los mejores planes... se acaban quedando siempre en nada.

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Cantos de sirena de un coche patrulla (7)

VI

VACLAV NERUDA (ALIAS THOMAS HARDFORD)

Redacte lo que le cuento como mejor pueda, pero sin que se note que habla un extranjero que no domina el idioma. El extranjero soy yo, y no usted, que lo escribe.

Freiheit ist Notwendigkeit. La libertad es el reconocimiento de la necesidad. Lo dijo Hegel y yo lo seguí como pude. Seguramente este concepto le suene extraño a la mayoría, pero cuando has nacido en un país que primero fue ocupado por los nazis y luego por los rusos, sin periodo intermedio alguno, te planteas muchas cosas. Y cuando oyes decir a tus mayores que echan de menos a los nazis porque por lo menos permitían emigrar, más aún.

Yo soy músico. Amo la música con toda mi alma. Seguramente eso ni se le había pasado por la cabeza, ¿no es cierto? Soy violonchelista y he sido también director de orquesta, pero las circunstancias económicas de mi país, sobre todo tras la caída del bloque comunista, me dejaron sin trabajo y sin futuro. 

Mi país se llamaba aún Checoslovaquia cuando lo abandoné, pero luego lo partieron en dos, sin que nadie sepa muy bien por qué. Por eso la división fue pacífica: porque las dos mitades no se odiaban entre sí ni comprendían por qué se disolvía una federación que había funcionado tantos años. Supongo que lo que sucedió fue que los dos presidentes regionales querían ser tratados con honores de jefe de estado. Así es como funcionan estas cosas, digan lo que digan más tarde los historiadores, empeñados en buscar explicaciones enrevesadas porque las comunes los delatarían como prescindibles.

En primer lugar estuve en Austria y Alemania, pensando que en esos países, tradicionalmente amantes de la música, encontraría trabajo. Y descubrí, por supuesto, que en los países amantes de la música ya hay muchos y buenos músicos. Demasiados, incluso.

Luego pasé a Francia, donde la música siempre fue un felpudo para dar entrada a las relaciones sociales, y cuando me cansé de competir con los canapés de foiegras por el interés del público vine a España, pensando que tendría las mismas dificultades que en todas partes, pero con un mejor clima y una sociedad más benigna. Poco después caí en la cuenta de que Neruda no era un nombre adecuado para un músico, porque aquí Neruda era otro, un poeta chileno muerto que ni siquiera se había llamado Neruda, sino Neftalí Reyes. Ya sé que Pablo Neruda es un gran poeta universal, pero como pariente, aunque sea lejano, de Jan Neruda, uno de los mejores escritores checos de todos los tiempos, siempre me ha molestado un poco esa usurpación del nombre. A los Neruda lo que es de los Neruda y a los Reyes lo que es de los Reyes.

Para la música, por tanto, me venía mal mi nombre, y para pasar desapercibido más aún, así que tuve que buscarme un seudónimo. O más de uno. Porque supongo que no tengo que explicarle que en España no hay ni tantos ni tan buenos músicos como en Austria o Alemania, pero tampoco tantos aficionados a la música clásica. Además, si le soy sincero, aquí las instituciones tienen más peso y poder en la música que en mi patria. Ni siquiera cuando Checoslovsaquia era un país comunista dependíamos tanto los músicos de los fondos públicos como dependen aquí.

Por razones que ahora no hacen al caso, decidí quedarme en España de todos modos, y como el dinero estaba en la música moderna, dejé el violonchelo y comencé a tocar la guitarra en un grupo que actuaba en las verbenas de verano. Una sola temporada me bastó para comprender que allí tampoco estaba el verdadero dinero, porque el representante se lo llevaba casi todo. Y me hice representante.

Mis inicios fueron bastante grises, y estaba punto de dejarlo cuando la televisión pública vino en mi auxilio con aquella Operación Triunfo que ni siquiera era originalmente española, pero que funcionó aquí con el entusiasmo propio de esta tierra. No se ofenda si le digo que creo que si los españoles son algo, o han sido algo en el pasado, no fue por talento ni por esfuerzo, sino por su insuperable capacidad para el entusiasmo. Los dos estaban locos, pero esa es la diferencia fundamental entre don Quijote y Gregorio Samsa.

A partir de ese momento, en vez de tener que ir por los karaokes tratando de abordar a adefesios medio borrachos, con la ayuda de la masiva publicidad de televisión, me bastó con poner algunos anuncios por los periódicos para captar futuros talentos a los que ayudar a comenzar su carrera musical.

Mi intención era sacarles dinero, eso lo reconozco desde el primer momento, pero nunca dejé de ser músico y nunca dejé de enseñarles lo que sabía. Les cobraba por introducirlos en una profesión para la que no servían, alabando un talento del que carecían completamente, es cierto, pero nunca encañoné a nadie con un arma para que viniese a verme. Lo mío, si quiere, era como tratar de formar un equipo de baloncesto en una tribu de pigmeos, pero no descartaba encontrar un día a alguien que, aunque no sirviese para pívot, pudiera convertirse en un base competitivo.

Con el tiempo, y con la distancia que el tiempo aporta, creo que más que un timador fui un trabajador social: no se imagina la clase de personas que respondían a mis anuncios y lo necesitadas que estaban de algo en lo que emplear el tiempo o de alguien que les escuchase.

En mi opinión, el gobierno se preocupa del tabaquismo o de los accidentes de tráfico porque se gasta luego mucho dinero en hospitales para las enfermedades derivadas del tabaco o curando a los heridos en las carreteras, pero como no se gasta gran cosa en salud mental, no se preocupa en absoluto de lo que ponen en televisión. Y no me negará que la programación de casi todas las cadenas es por lo menos tan perjudicial para la salud mental como el tabaco para los pulmones.

Si estás desquiciado es tu problema, aunque eso te inhabilite para trabajar, con lo que ningún gobierno se preocupa. Y la gente acude a anuncios como el mío, o a otros aún peores, donde les dicen que pueden perder treinta kilos en tres semanas, o hablar con los muertos, con los ángeles, o con todos a la vez, y sin necesidad de saber idiomas.

Gané bastante dinero en aquella época, es cierto. Pero si pudiésemos examinar de algún modo qué fue de los que vinieron a mi estudio y que fue de los pocos que rechacé, estoy convencido de que hubo menos suicidios, menos alcoholismo y menos drogas entre los que me dieron el dinero a mí que entre los que finalmente tuvieron que dedicarlo a otra cosa. Los que vinieron a mí se gastaron un dinero en algo para lo que no servían, pero conocieron gente, emplearon el tiempo, aprendieron algo de música y tienen en casa un montón de discos que siguen y seguirán regalando a las amistades. ¿Por qué cree que no me denunció ninguno? Algunos incluso recuperaron la inversión y hasta tuvieron beneficios, porque lograron vender más de la mitad de los discos, o incluso todos. Los vendieron ellos, puerta a puerta, o en el rastro, o se los colocaron a los clientes de la empresa donde trabajaban, pero los vendieron. 

No soy un timador. Nunca lo fui. Se lo aseguro.

Cuando recibí la llamada de Cristina ya estaba dejando el negocio de la representación musical. No sé dónde encontraron el anuncio, pero cuando llamaron ya me había deshecho de buena parte del material y tenía lo que quedaba en un almacén de las afueras. Unas semanas antes les hubiese respondido que ya no admitía más candidatos, pero en aquellos días atravesaba un mal momento y les dije que viniesen a verme.

Monté los altavoces y los micrófonos y les mandé cantar algo, cualquier cosa, decidido a aceptarlos si no eran exageradamente malos. Entonces los escuché y me di cuenta de que eran lo mejor que había pasado por mi manos, porque aquellos tres amigos, tan distintos entre ellos, ni impostaban, ni exageraban, ni traían malos hábitos de otros lugares. Además, le ponían verdadero corazón a lo que hacían y no eran engreídos. De hecho, parecía que les daba igual lo que les respondiera, y eso me cautivó.

No los seduje yo a ellos, sino ellos a mí, con su naturalidad. Así fue.

Pocos días después de la prueba les dije que los aceptaba y decidí sacar de ellos lo mejor que tuviesen, y no sólo dinero. Me hacía falta el dinero, así era, pero moderé mucho los gastos y me conformé con lo mínimo por miedo a que alguno se echase atrás.

Les enseñé canto, vocalización, ritmo, y un poco de solfeo. Sebastián aprendió incluso a tocar la guitarra y Cristina empezó a cantar en los registros graves, que era donde su voz resultaba verdaderamente atractiva. 

Trabajé con ellos montones de horas, y cada día que pasaba avanzaban a ojos vistas, porque absorbían lo que les enseñaba con verdadera ansia. Por eso no lo creí cuando después del primer concierto me dijeron algunos amigos que anduviese con ojo, porque habían asistido demasiados policías a aquella actuación.

No lo creí, o más bien no lo creí del todo, debería decir.

Cuando me advirtieron de que mis muchachos podían estar relacionados con la policía hice un rápido examen de conciencia y no encontré nada que reprocharme, ni que pudiese reprocharme la justicia. Y además, me pareció un reto: ¿hasta qué punto se puede ser guardaespaldas de una chica guapa y no acostarse con ella si surge la oportunidad? Hay una película sobre ello, como sabe, y yo pensé algo similar: ¿hasta qué punto un policía es policía por encima de lo demás si le surge una alternativa más interesante? Y no se trataba de un soborno ni nada parecido, sino de una posibilidad perfectamente legal, y hasta promovida por sus superiores.

Confieso que me pareció un desafío y lo acepté: sus superiores los enviaban a intentar cazarme a mí y yo trataría de cazarlos a ellos. Ellos contaban con la ley, y yo con la naturaleza humana. Ellos llevaban buena cuenta de las facturas que les iba dando y de lo que recibían a cambio, y yo les demostraba, día a día y en la práctica, que realmente podían cantar y satisfacer a un público neutral, que no estuviese formado mayoritariamente por amigos. ¿Quién sería más fuerte?

Disfruté mucho de aquellos meses. Trabajé como un verdadero animal, pero nunca lo había hecho de tan buena gana. Llamé a toda la gente que conocía, les busqué buenos profesores, buen vestuario, y elegí durante horas y horas el repertorio que mejor se ajustaba a cada uno. Seguramente cometí errores, pero no fue por desgana ni desinterés, sino quizás por todo lo contrario.

Sebastián era un perfecto personaje country. Podía haberle creado un personaje del tipo de Bruce Springsteen, duro y tierno a la vez, y en alguna ocasión llegó a cantar canciones de el boss, especialmente tougher than the rest, pero su tono de voz se prestaba más a las canciones de John Denver. Y cuando Cristina se unió a él, formaban un dúo verdaderamente impresionante.

Sebastián era la clase de tipo que parecía estar siempre de mal humor, pero lo que le molestaba en realidad era no ser mejor de lo que era. Su principal baza consistía en que jamás daba por hecho un defecto, ni se disculpaba, como tantos que he visto, diciendo “yo es que no puedo hacer esto o lo otro”. Lo intentaba todo, lo lograse o no, como si creyera que a fuerza de ensayar podría llegar a volar, incluso. Y voló. No se imagina lo que llegó a saber hacer con la guitarra en sólo unos meses. Ni yo mismo podía creerlo.

Cristina, en cambio, era una mujer insegura. Le gustaban sus canciones, pero no acaba de estar convencida de que era lo mejor que podía encontrar. Nada era lo mejor que podía encontrar, aunque cualquier cosa valía para el momento. Se atrevió con canciones de Luz casal, de Remedios Amaya, y hasta de Bonnie Tyler. No lo hacía mal, y como era una chica guapa, gustaba al público sobre todo en los papeles más enérgicos, como cuando cantaba We don´t need another hero. Con Diego intentó cantar algunas canciones de Dover, pero él ya tenía sus propios planes y hasta su propio repertorio, que me consultaba de vez en cuando.

Diego fue mi mejor éxito, de eso no cabe duda. Un cantante joven, dinámico, moderno y con gancho. Diego, además de absorber todo lo que le podía enseñar, se buscaba contactos y ayudas por donde podía. Creo que supe que dejaría la policía para dedicarse por completo a la música mucho antes que él. No había más que verlo, gesticulando delante del espejo o ensayando los pasos de baile, para convencerse de que ese chico no podía sentirse a gusto con un uniforme, persiguiendo delincuentes por las calles, o trabajando en una oficina. 

A él le costaba decidirse, pero cuando vio aparecer a los de estupefacientes en su primer concierto con los Kalinka, el concierto por el que tanto había luchado y tanto se había esforzado, le quedó claro quién estaba de su parte y quién en contra suya. Desde aquel día miró a todos los policías con desconfianza y dejó de tener dudas conmigo al ver con qué rapidez le encontraba un sustituto para el batería que se llevaron detenido. Si pensó en algún momento buscarse otro manager, aquel día decidió quedarse conmigo, y seguimos juntos hasta ahora, aunque yo ya me haya retirado a un segundo plano y sea otra persona la que le acompañe en los conciertos y le lleve buena parte de sus asuntos.

Y no es porque me afecte personalmente, pero creo que hizo bien en quedarse conmigo. Con otro representante no creo que hubiese grabado el disco ni hubiera tenido nunca el éxito que tuvo. Reconozco que vender cien mil copias del primer disco fue un golpe de pura suerte, pero la suerte hay que buscarla y hay que conocer a las personas adecuadas. Y en aquel momento, yo las conocía.

Lamento no poder contarle quién pagó aquel disco, porque es parte del secreto profesional, y la persona o personas que sufragaron la producción prefieren mantenerse en el anonimato, pero desde luego fue alguien con muy buen criterio a la hora de encontrar nuevos talentos, porque desde aquel Diego-Go han salido otros seis álbumes y las ventas no han hecho más que crecer.

Ya ve que todo terminó bien, y donde falta la tragedia falta el interés. Lo único que lamenté realmente de toda esta historia fue la denuncia final señalando como policías a mis tres chicos. Y no porque yo no lo supiera, que lo sabía, sino porque ya no podía seguir simulando que lo ignoraba. Quien quiera que enviase las copias de los carnés profesionales de los tres se empleó a fondo, porque no me las envió sólo a mí, sino también a algunos empresarios con mucha influencia, que no querían ver a un policía por su local ni de broma. Si me lo hubiesen enviado sólo a mí, quizás hubiese tenido arreglo hablando con ellos, pero de este modo no me quedó más remedio que hacerme el ofendido y despedirme.

Desde el punto de vista económico no me hizo mucho daño aquella ruptura, pero lo sentí por ellos; sobre todo por Sebastián, que dejó la música. A Cristina en el fondo le daba igual, porque estoy seguro de que para entonces ya estaba pensando en casarse y dejar la policía. Puestos a hacer conjeturas, yo siempre he pensado que esa jugada fue obra del marido de Cristina, que había tenido un enfrentamiento grave con Sebastián y que sabía, sin duda alguna, a qué se dedicaba su novia. No puedo asegurarlo, pero estoy casi convencido de que fue él: le devolvía a Sebastián los puñetazos que no pudo devolverle en persona, avisaba a sus compañeros de pubs y salas de fiestas y alejaba a su futura mujer del ambiente de la música, que está mejor para una amiga que para una esposa, sobre todo en algunas mentalidades, ¿no le parece?

Y ahí concluyó la historia. No diré que acabó poniendo a cada uno en su lugar porque las historias verdaderas no terminan nunca, pero si acordamos acotar ese periodo de tiempo, la conclusión es que yo no timé a nadie. Más bien fui yo el engañado, aunque al final lograse sacar provecho de mi condición de víctima.

¿Pero eso es lo que se está de moda, no?

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La historia de la civilización

La historia de la civilización

Éste es un reportaje constituido por tres episodios de una hora cada uno, pero os doy mi palabra de que en cuanto a lo revelador que es, serán las tres horas mejor invertidas en mucho tiempo, no digamos ya, si os interesan mínimamente ramas del conocimiento tales como la antropología, la filosofía o la psicología..

Documenta la transición de una comunidad indígena a la civilización y arroja mucha luz sobre el origen de todos nuestros males; es la versión cognoscible de la historia de Adan y Eva.

My year with the tribe 1: www.youtube.com/watch?v=TDtUtNdWmJg

My year with the tribe 2: www.youtube.com/watch?v=G21dIVqlVzw

My year with the tribe 3: www.youtube.com/watch?v=qSjhRmEhi7k&t=3075s

Lo ideal es que veáis los tres episodios en su correspondiente orden pero antes que no ver ninguno, os instigaría a ver el último al menos.

Así mismo, os animo a volver y compartir vuestras percepciones una vez lo hayáis visto

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Hipocresía; una incómoda invitación a la autocrítica

Hipocresía; una incómoda invitación a la autocrítica

Menéname es una plataforma social en la que se le confía a los propios usuarios gran parte de la moderación, ésto implica que el usuario tiene un poder que ejerce libremente, en base a su propio criterio.

Ahora bien, cuantos usuarios creéis que ejercen ese poder de manera irresponsable, cuántos creéis que abusan de él incurriendo en mala praxis?

Y a continuación planteo: Qué autoridad moral creéis que tienen esos usuarios para criticar la corrupción en la política o cualquier otra forma de abuso? Creéis que esos usuarios gestionarían un mayor poder, de una forma más responsable? En qué consiste la corrupción, sino en un "dejarse llevar" por las tentadoras posibilidades que acarrea tu capacidad en un momento dado?

Algunos tratarían de eximir su culpa, excusándose en que se trata del comportamiento general, normalizado; "es lo que hacían todos" pero acaso no podrían abanderar íntimamente los políticos corruptos, esa exacta justificación para convivir con su culpa?

Creo que muy pocas personas han llegado a la suficiente madurez, sabiduría, a través de experiencias empíricas propias, como para ser incorruptibles; una cualidad que necesariamente nace de la plenitud y nos haremos un gran favor a nosotros mísmos siendo conscientes de nuestra debilidad y sus manifestaciones, siendo honestos con nosotros mismos.

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La esquizofrenia del coche

Vengo de leer los comentarios de este artículo, y el caso es que no salgo de mi asombro.

Por una parte, nos pasamos aquí la vida diciendo que el coche es el enemigo, que contamina, ocupa espacio, hace ruido y tiene que acabarse la era del automóvil privado para dar lugar a un mundo con menos vehículos, más transporte colectivo y una movilidad más ecológica.

Y ahora resulta que, cuando cierran una fábrica de coches, porque el sector va a menos, la gente se pone de uñas y dice que hay que resistir, montar una fábrica nacional o yo qué sé que soluciones más para mantener los puestos de trabajo.

¿De qué coño vamos? ¿De que se fabriquen los coches pero no se usen?

Yo creo que ya somos mayores y deberíamos saber que si combatimos el uso del vehículo privado, combatimos también a sus fabricantes y combatimos, a un tiempo, a los trabajadores de esas industrias. Públicas. Privadas. estatales. Nacionalizadas.

Si hemos optado por el transporte público y el medio ambiente, pues muy bien, adelante: pero no seamos tan hipócritas como para ahora ir a decirles a los despedidos que resistan, que la lucha es el único camino, que estamos con ellos y apoyamos su resistencia.

Queremos impuestos verdes, limitación de emisiones, ampliación de carriles bici, limitaciones al aparcamiento, zonas sin tráfico... Vale. Pero si se pierden 3000 empleos directos y 12.000 indirectos (para empezar) sólo con el primer cierre, pues habrá que asumirlo, ¿no?

¿O es que la mitad de los usuarios de este sirio con bots programados para responder automáticamente?

Si se habla de coches ======> A tomar por culo. Artefacto infernal que mata y daña mis pulmones.

Si se habla de fábricas cerradas: ======> Resistid, compañeros. Os apoyamos. La lucha es le camino.

Pues a ver si mejora un poco el programador de los bots, porque ya empieza a parecer cosa de gilipollas.

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Crispación y polarización en redes: análisis del Twitter de Rafael Hernando

Este artículo fue inicialmente publicado en Twitter en forma de hilo. Se agradece difusión. twitter.com/Martinez__Rafa/status/1266675559284826112?s=20.

Este breve artículo pretende hacer un análisis de la actividad en Twitter en el mes de mayo de Rafael Hernando (@Rafa_Hernando), senador y hombre fuerte del PP.

Ha publicado, hasta el momento, 157 tuits.

🔹133 de esos tuits (85%) son críticas al Gobierno.

🔹Ha escrito "dr. Fraude" 23 veces.

🔹Ha escrito "Coletas" 8 veces. 

🔹Ha hablado de "socialcomunismo" en 14 ocasiones.

🔹Venezuela o similares: 7 veces.

🔹"Podemita": 4.

🔸Menciones al PP, o a medidas tomadas por el PP: 9.

En este mismo período, el sr. Hernando ha publicado 38 tuits con material multimedia.

🔹32 (85%) son críticas multimedia al Gobierno.

🔹Solo 2 relacionadas con el PP. 

Es decir, la actividad en redes del sr. Hernando se basa únicamente en la crítica (en muchas ocasiones maleducada) al Gobierno. La difusión de propuestas o críticas constructivas es marginal.

¿Funciona esta estrategia? Mucho. Hernando ha ganado aprox. 3500 seguidores este mes.

El impacto en seguidores e impacto en esta crisis sanitaria por parte de @Rafa_Hernando es el mayor desde que tenemos registros disponibles en @SocialBlade. Únicamente con la moción de censura (mayo, junio 2018) encontramos picos similares.

Hasta aquí los datos. Mi opinión: es vergonzoso que un político de primera línea de la oposición (recordemos, secretario tercero del Senado, exportavoz del grupo popular en el Congreso y hombre fuerte de Rajoy) utilice reiteradamente términos como "Dr. Fraude" o "Coleta". 

Es nuestro deber como ciudadanos exigir que los políticos se comporten como lo que son, representantes de la ciudadanía, y no como tertulianos de barra de bar o como cuñaos en una cena de Nochebuena. 

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Los derechos y los fueros

Allá por los años ochenta, siendo yo aún menor de edad, recuerdo que había en mi pequeña ciudad un médico jubilado con ideas muy raras que a veces se entretenía hablando con los chavales de una especie de club juvenil o asociación que teníamos.

De entre las muchas perlas suyas que aún recuerdo, me viene ahora una a la memoria: los derechos no importan gran cosa; lo que importan son los privilegios. Un derecho que tiene todo el mundo viene bien, pero lo que de veras vale la pena es tener tú un derecho que los demás no tienen. O sea, un privilegio o un fuero.

Entonces me pareció escandaloso, pero a medida que pasa el tiempo me doy cuenta de que todo está girando hacia ahí.

Por si alguien sospecha que voy a hablar de vascos y navarros os aclaro desde ya que no es así. El tipo hablaba de los fueros en general, y de los leoneses en particular. Y cuando alguien le dijo que la gracia era pedir los mismos derechos para todos nos lo negó tajantemente: entonces, el que ahora tiene el fuero pedirá otra cosa, porque el que disfruta un fuero odia ante todo la igualdad. Lo que quiere es una ventaja. No se trata de que tu pueblo no pague impuestos o pague menos. De lo que se trata es de que pague menos que el pueblo de al lado, porque eso es lo que hace que los recursos se trasladen a tu municipio. Lo otro no te arregla nada, si no es frente a territorios más lejanos.

Y lo mismo que pasa con los territorios, pasa con las personas.

Por eso hay quien se niega a una ley de violencia intrafamiliar: porque no se trata de frenar la violencia, sino que se intentar dar a unas personas más derechos que a otras.El fuero no es la generalización de derechos, sino la discriminación positiva. Conseguir que, por algo, por ser rey, mujer, inmigrante o maltratado mental, te concedan una ventaja en algún proceso, ya sea la obtención de una vivienda, una guardería o una plaza de funcionario. Y que te la concedan costa de otro, claro.

Y eso es lo que veo a mi alrededor: el ventajismo se impone. El pretexto es lo de menos. Compensación, deuda histórica, opresión, caspa... Da igual. Lo importante es poder sacar ventaja perjudicando a otro. Ahora funciona el victimismo, pues victimismo. Luego ya veremos la narrativa que hay que montar, al servicio, eso sí, de la misma idea.

Pero el precedente es nefasto. Y apoyar esas cosas es de idiotas o de canallas.

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El registro de alquileres como solución a la ocupación

Durante estos meses de verano se ha intensificado la cobertura informativa sobre el fenómeno de la ocupación/okupación, a mi parecer de forma exagerada y buscando el sensacionalismo con varios motivos posibles: creación de una alarma social para mostrar al gobierno cómo débil o cómplice, intereses de empresas de seguridad para aumentar el número de instalaciones de cámaras, criminalización de colectivos pro-vivienda por asociación, exigencia de políticas de mano dura contra cualquier tipo de protesta... hay varios, y parece que la protección a la propiedad privada quede en un segundo término, ya que no se aplican soluciones efectivas.

Hemos escuchado varios argumentos indicando que con la ley actual, el delito de allanamiento de morada lo pueden resolver las fuerzas de seguridad del estado y que en muy pocos casos se tiene que esperar a que haya una sentencia judicial. Obviamente que a un afectado real le digan que su caso entra dentro de un 1% de casos problemáticos que la policía no ha podido certificar no le va a aliviar y solucionar su problema de una forma rápida y justa.

Entonces, ¿por qué no existe un registro obligatorio de contratos de alquileres? Es cierto que existen los contratos verbales con plena validez jurídica, pero obviamente esos contratos verbales se utilizan para ocultar la transacción, ya sea por temas fiscales, por temas de que la vivienda no está en condiciones, por sobreocupación o porque se esté realquilando una vivienda otorgada en VPO.

Tenemos registros de contratos laborales, de seguros de automóviles, de saldos de cuentas corrientes, de empadronamientos, de certificados sanitarios para establecimientos... registros necesarios para el funcionamiento del estado y muy convinientes para la sociedad. Personalmente, me gusta saber que mi contrato laboral está registrado, que la policía puede inmovilizar un vehículo si el conductor no está asegurado, o que tal restaurante cumple la normativa sanitaria.

Tener un registro de alquileres implicaría que el inquilino recibiría una copia del registro del contrato de alquiler en el organismo oficial correspondiente, lo que le garantizaría poder demostrar la vigencia de ese contrato. Si el inquilino indica un método de contacto (móvil, email, dirección física) podría recibir cualquier actualización del registro en esa vivienda, por si al dueño le diera por darle de baja del registro, por ejemplo.

Si no se crea este registro es porque existen intereses que no quieren que exista esa información accesible de manera ágil por parte de las FCSE, principalmente para poder ocultar transacciones por temas fiscales o normativos. Cualquier otra solución que se está proponiendo persigue otros objetivos sin la voluntad real de solucionar el problema.

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Torii Suneemon, héroe japones en tiempos de Oda-Tokugawa

El asedio Takeda a Nagashino (1575) cortesía de Angus McBride. El crucificado tiene una interesante historia.

Se trata de Torii Suneemon, un ashigaru al servicio del comandante de Nagashino: Okudaira Sadamasa. Torii se ofreció a atravesar las líneas enemigas en busca de ayuda. Para ello tuvo que descender por un precipicio hasta el río y abrirse paso silenciosamente a través de las redes que habían colocado los Takeda en el propio río. Después se dirigió a Okazaki donde informó a Tokugawa Ieyasu y Oda Nobunaga de que el castillo sólo aguantaría tres días.

A continuación regresó a Nagashino con intención de informar a los defensores de la pronta llegada del ejército Oda-Tokugawa. Se había acordado que Torii señalaría la noticia encendiendo tres balizas, cosa que hizo. Según la tradición no se conformó con encender las señales sino que intentó regresar al castillo para informar personalmente. Puede que fuera así o simplemente los Takeda rastrearon la zona al ver las señales, ya que el caso es que Torii fue capturado.

Torii fue conducido ante los muros de Nagashino y conminado a informar a los defensores de que no recibirían ayuda pero este les gritó que resistieran. El resultado es que fue crucificado.

Uno de los samuráis takeda, Ochiai Michihisa, quedó tan impresionado por el valor de Torii Suneemon que adoptó como insignia personal la imagen de un Torii crucificado. Fuente: www.elgrancapitan.org/foro/viewtopic.php?f=21&t=16835&start=32

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Analfabetos digitales SIM vergüenza

La deformación profesional o pedantería, llámenlo como quieran, me obliga a escribir esto :)

Todo el mundo debe saber ya que lo de dilma y sus filtraciones pero parece que a NADIE se le ocurrió pesar o señalar que en una tarjeta SIM no se guardan fotos, wasaps, mensajes de télegram, pantallazos o tuits... En tal caso es en la tarjeta de memoria SD del teléfono.

Esta inaceptable falta de rigor me hace preguntarme quién es el unútil o inútiles que insisten en decir "La SIM" si es el Juez (o lo que sea) si son los periodistas (mal por no corregirlo) o si el nivel en España es el que es.

Hale, si no lo digo Reviento xD

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La subvención a la cría de morsas

Los que somos de campo lo recordamos bien, y seguramente lo recordaréis algunos aquí: cuando la Unión Europea subvencionó la siembra de girasoles, decenas de miles de hectáreas se sembraron de girasoles, y buena parte del girasol no se recogió nunca, porque el producto final no era el girasol, sino la subvención.

Con la PAC, en general, está sucediendo algo similar. Por aquí se leen quejas de que las ayudas acaban en manos de la casa de Alba y otros terratenientes. Y no sólo es cierto: es que es lógico. Tristemente lógico.

Hay una ley que deberíamos tener en cuenta cuando hablamos de ayudas públicas, ya que estas se pagan con el dinero de todos.: toda subvención aumenta la cantidad de aquello que se subvenciona.

Si mañana saliese una subvención de 500€ por cabeza a al cría de morsas, poco importaría nuestro clima, la latitud de nuestras costas o lo que fuese: se criarían morsas. Y si hay que hacerlo tierra adentro, pues las tendríamos en el lago de Sanabria o en el embalse de Barrios de Luna, que tienen el agua fresquita. Pero las habría. Supongo que nadie lo duda.

Y diréis que es lo normal, que para eso se subvenciona, ¿no?

Pues sí, pero es peligroso. Muy peligroso.

Si se crea una pensión a la cojera, aumentaré el número de cojos. Esto lo publicaba Scientific América hace muchos años en uno de eso estudios candidatos al IG Nobel. El que crea ese subsidio piensa que va a ayudar a los cojos, y lo hace, pero entonces aparecen los cojos simulados, los que valoran la rentabilidad de autolesionarse, etc. Y el número de cojos aumenta en la medida en que la subvención valga la pena.

Si se subvenciona que un delito cualquiera sea considerado maltrato, habrá más denuncias de maltrato.

www.anticorrupcion.eu/wp-content/uploads/2017/08/Informe-Fondos-Europe

Si se subvenciona el miedo, mediante los ERTE o cualquier mecanismo similar, tipo "te puedes quedar en casa y seguir cobrando", habrá más miedo y se alejará cualquier solución

Si mediante mecanismos como la pensión no contributiva se subvenciona la economía sumergida, habrá más economía sumergida.

Si se subvenciona con sanidad gratuita a quien viola una frontera y pega a un policía, habrá más gente deseosa de saltar fronteras y agredir a policías.

Si se subvenciona con dinero público la mala gestión de una empresa, un banco o una caja, habrás más bancos, cajas y empresas mal gestionadas. Y si encima a sus gestores se les pagan bonus multimillonarios por haberlas arruinado, será una orgía de mala gestión.

Si con nuestro voto subvencionamos la mentira, el sectarismo, la corrupción y el incumplimiento de los programas, habrá más políticos mentirosos, sectarios, corruptos y chafarderos.

Cuando un recurso de todos se entrega a alguien, para algo, no hay que pensar sólo en las consecuencias inmediatas.

La cara B también cuenta.

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Ideología vs Pragmatismo

Imaginen esta situación, eres un vegano y tienes por ideología que no consumes nada hecho a partir del sufrimiento animal, tienes que resolver un problema que es vestirte, entonces resuelves el problema comprando ropa hecha de tejidos vegetales, problema resuelto, Tienes hambre, resuelves el problema comiendo alimentos de origen vegetal, Tienes un problema de deficiencia de X o Y vitamina/mineral, se resuelve con un multivitaminico.

Para todos esos problemas antes mencionados hay varias soluciones posibles y hasta ahora hemos podido compatibilizar la ideología con una solución , que otras personas pueden discutir si es mejor o peor pero es una solución al problema a fin de cuentas.

Ahora imaginemos que estamos en la jungla, nos muerde una serpiente venenosa, vamos al hospital y el medico nos dice que no nos preocupemos, que si bien es un veneno mortal, el hospital nos proporciona el suero antiofidico (en antidodo) y que nos va a salvar la vida.

El problema es que el antídoto esta hecho a base veneno de serpientes a las que se captura y se tortura, tomar ese antidoto va en contra de nuestras convicciones ideológicas, pero no hay un sustituto vegetal, entonces en esta oportunidad, la solución es dejar de lado nuestra ideología y aceptar una solución. (o morirnos).

Creo que nadie en su sano juicio optaría por morirse solo por no salirse de su ideología y sin embargo, vemos esa misma opción en economía y política, muchas personas rechazan soluciones pragmáticas a problemas serios solo por que la solución va en contra de su ideología aun cuando no existan soluciones que se adecuen a sus ideas.

EDIT. Por las dudas aclaro, puse el ejemplo del veganismo por que me pareció adecuado para ilustrar una situación sin necesidad de hablar de un tema especifico de política o economía que podría llevar a un debate sobre el tema en si mismo y no sobre el concepto de ideología vs pragmatismo , este post no tiene ni intenta tener nada en contra del veganismo (ni a favor)

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Se acabó la teta

Una penita de fútbol que nos está quedando. Lo han/hemos roto por abajo y romperá por arriba. Se terminan los "cracks" y pierde interés en los más jóvenes. Las federaciones crean nuevas "competiciones" regionales infantiles que desarman el futbol local, que si ya estaba enfermo, con esto lo fulminan.

Ganar es más importante que enseñar y generar ingresos para los que que viven en la oficina es más importante que el deporte en sí. Los niños tienen más alternativas.

Cuando conviertes en elitista el deporte que menos lo era, ya dependes del negocio. Para el fútbol solo hace falta un pedazo de terreno y una pelota. Ahora hay una enorme maquinaria gestionando algo que era tan simple.

Han creado mercenarios del fútbol olvidándose que este deporte crecía justo de modo opuesto. Se ha roto la lógica por el dinero. Más de 5000 entrenadores con título para entrenar en primera división aglutinan el fútbol desde una perspectiva que se aleja de todo lo que han aprendido. Llegan a categorías inferiores con una idea muy alejada de lo que fue el fútbol base de toda la vida, auspiciados por clubes que tienen clubes "de" niños, no "para" niños.

Muchos pensaréis que estoy divagando, lo sé, pero es mi forma de verlo. Llevo muchos años siguiendo el deporte de base. Hace ya más de 20 años que los que han abandonado por hartazgo vaticinaban sobre esto, y aquellos que aguantaron acabaron aburridos y ninguneados.

Ahora con el coronavirus las cosas se complican, el negocio se tambalea y el tejado comienza a romperse con la base resquebrajada. 

El nivel de base es alarmante. 

Al igual que con el Covid, todos sabemos la teoría, pero nadie la aplica.

De momento Francia es la primera nación en la que, el que paga, ha decidido que se acabó la teta. El fútbol no se sigue allí de acuerdo a lo que cobran niñatos como Mbapé y Neymar y si alguien no lo remedia nadie va a retransmitir máxima competición francesa.

Podemos pensar que es un hecho aislado olvidando que la aficción es la que paga, esa aficción se ha cansado, sus niños, ya mayores, han perdido interés y tienen otros alicientes. Lo triste, es que el empresario que paga, va a seguir ganando lo mismo en otra cosa, dejando roto un deporte infestado de intereses particulares.

www.20minutos.es/deportes/noticia/4543052/0/ligue-1-sin-televiosion-pa

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El ser que menea

El ser que menea

¿Qué es eso ?, ¿qué estoy viendo?

¿Soy un Artículo?, o ¿es un Arti'culo?

Hace ya casi cuatro años que Menéame, el que fué el principal agregador de noticias en nuestro país, optó por una remodelación visual de su interfaz y presentó la incorporación de una línea editorial propia: los ARTÍCULOS. -Cita-

¿A que resulta interesante el Artículo mostrado en la imagen?

Pues sí, eligieron este ejemplo del popular usuario @LUIS (muy conocido por sus servicios prestados a la comunidad de MNM es un usuario para pruebas) para ilustrar en el blog oficial el lanzamiento de los Artículos en la web, queriendo así motivarnos a crear un contenido DE CALIDAD, alejado del nivel profano de cualquier usuario de Tik-Tok actual, profesionales en redactar arti'Culos de renombre internacional (nótese el sarcasmo).

Citando las palabras que usó @Seijo en la presentación de los nuevos "Artículos" :

Todos los usuarios que así lo deseen pueden escribir sobre los temas que tan bien conocen y que se quedaban un poco perdidos entre comentarios largos, en el sub de artículos o en alguna conversación en Nótame. -04.julio.2017-

Parece que a los usuarios se les han olvidado estas recomendaciones realizadas por aquel entonces y han quedado más muertas que la momia seca de la foto anterior.

Y no solo eso, sino que además, en su lugar, hemos creado un cocktail con ellas y actualmente parece una moda menear escritos donde el asunto que prima es:

"el tema que tan bien conoces: los comentarios de menéame" -12.febrero.2021-

Un patio de recreo (con bulla pero sin bullying).

¿No está esta idea del "patio de recreo" muy alejada del concepto inicial que nos quería transmitir @LUIS?

Para darle un protagonismo REAL a esta sección de Artículos y fomentar el que se cree un contenido más o menos decente en ella -y así los usuarios tengan vergüenzas de airear las propias al público en general-, traigo estas palabras, sacadas de la misma entrada del blog oficial:

En Menéame estamos trabajando duro para mejorar la plataforma, hacerla más participativa y cómo conseguir dar más voz a los usuarios.

¿Trabajaremos duro meneando?

Creo que queda bastante por depurar en la integración/aceptación de los Artículos y Comunidades en la plataforma, al igual que a nosotros nos queda bastante por depurar en el uso de nuestro gran superpoder:

"El meneo"

Intentemos alejarnos de lo propio de aquel patio de recreo, en el que de infantes, todos alguna vez hemos estado.

Así que abusemos usemos nuestro "superpoder" para votar con sinceridad (y en consecuencia) el contenido creado en la comunidad de Menéame, un contenido creado por el meneante: el ser que menea.

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El experimento mental de la "Tierra Gemela" (H. Putnam). Internalismo y externalismo semántico

Los llamados experimentos mentales son recursos imaginativos, hipotéticos, normalmente no realizables en la práctica (sin posibilidad empírica) al menos en el momento de su presentación, diseñados para, a través de un razonamiento que se pretende lógico, mostrar ciertas conclusiones o paradojas. A pesar de que se vienen utilizando en la historia del pensamiento al menos desde la Antigua Grecia (piensen en las aporías de Zenón de Elea entre otras), es bien conocido el peligro que el uso de estos experimentos mentales entraña (piensen de nuevo en las aporías de Zenón): al plantearnos situaciones no dadas en el presente o incluso a veces imposibles, las conclusiones que se quisieran extrapolar podrían ser poco fiables. A este respecto Daniel Dennett advertiría de algunos de estos experimentos llamándoles “bombas de intuición” e “inevitablemente conservadoras”, al estar estos sutilmente diseñados para centrar la atención en ciertos aspectos vía descripciones que se valen de conceptualizaciones populares, mientras esas mismas descripciones dejarían en manos del público hallar implicaciones importantes para el asunto a tratar y que pudieran ser fundamentales para una correcta conclusión.

Hecha esta advertencia (es un asunto muy interesante pues engancha directamente con la forma en la que muchas veces creamos nuestras opiniones, creencias, ideologías o posiciones políticas), diremos que los experimentos mentales han sido y son una herramienta que ha ayudado en el avance del conocimiento, y nos pueden brindar interesantes reflexiones si se tienen esas advertencias en cuenta tanto en su diseño como en su interpretación. Les propongo así, les reconozco que motivado tal vez hoy por el hastío que le produce ya a este que les escribe la manera en la que se presenta una campaña electoral que ni siquiera comenzó oficialmente (y lo que nos queda, morena), a reflexionar y charlar sobre el experimento mental conocido como Tierra Gemela.

Relativamente popular, seguro que muchos de ustedes ya lo conocerán, el experimento de Tierra Gemela fue presentado en 1975 por el filósofo, matemático e informático Hilary Putnam en su obra “The Meaning of “Meaning” (El significado de “significado”)", y nos invita a reflexionar, en línea con su filosofía analítica, sobre el origen de los significados que diariamente utilizamos en el uso del lenguaje, argumentando así el filósofo a favor del conocido como externalismo semántico: posición dentro de la filosofía del lenguaje que defiende la visión de que el significado de un término está determinado, al menos parcialmente, por factores externos al sujeto; y que se contrapone al internalismo semántico, que por su parte defenderá que los significados estarán determinados únicamente por estados mentales referentes a entidades subjetivas. Toda esta una polémica que se englobaría en una de mayor ámbito y que hace referencia a la oposición entre externalismo e internalismo mental  (y me disculparán no extenderme más aquí, pues el asunto daría para varios artículos). El lector podrá fácilmente asociar el asunto con muchas de las actuales controversias de orden ideológico y político, y así con muchas de las discusiones que casi diariamente aparecen aquí mismo en Menéame.

El experimento mental de la Tierra Gemela.

Imaginen un universo donde existiera un planeta casi idéntico a nuestra Tierra; le llamaremos Tierra Gemela. Tan parecido que orbita alrededor de una estrella que es idéntica al Sol, que tiene una luna y un firmamento estelar como el nuestro. Ciclos astronómicos y distancias similares. Tan casi idéntica que demuestra una misma historia geológica, de manera que cualquier accidente geográfico del presente o del pasado se repite en la misma forma. Habitantes, plantas y animales, también se repiten, compartiendo misma biografía y desarrollo evolutivo, siendo así que para lo que nos interesa, el desarrollo humano ha sido el mismo, de forma que cualquier comunidad es idéntica tanto en la Tierra como en la Tierra Gemela. Historia, divisiones políticas, estados y relaciones suceden de la misma forma que ahora mismo. Todo igual de terrorífico. Podemos así imaginar un habitante en la tierra, Óscar, con su doble en la Tierra Gemela, Óscar Gemelo.

Y digo casi idéntico pues sí existe una diferencia entre ambos planetas: el agua. Aparentemente (intensión) es igual en ambos planetas: la encontramos en los mismos lugares (ríos, lagos, mares, glaciares, nubes, etc.), adopta los mismos estados a mismas condiciones, tiene las mismas propiedades, los mismos usos, etc. Solo que el agua de la Tierra, la que usted conoce, está compuesta por H2O (extensión), mientras que la de la Tierra Gemela está compuesta de dos elementos desconocidos para nosotros habitantes de la Tierra, llamémosles X2Y. El objeto (si es que se puede llamar así al agua) al que se hace referencia es químicamente diferente.

Por último, imagine que nos encontramos en el año 1750, antes de que cualquiera en la Tierra o en la Tierra Gemela conociera la composición química del agua. Los cerebros y estados mentales (el conocimiento y la subjetividad si así lo queremos llamar) de Óscar y de su gemelo serían exactamente idénticos, sin embargo uno se refiere con la palabra “agua” al H2O y el otro al X2Z… ¿afirmaría usted entonces que el significado de la palabra “agua” es el mismo para los dos?, ¿qué opina?.

 O presentada la cuestión de otra manera, ¿el significado es solo una construcción mental dependiente del sujeto (visión semántica internalista), o por el contrario al menos en parte refiere a la realidad externa (visión semántica externalista)?, ¿es todo lenguaje?...

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 Nota: en este enlace, a partir de la diapositiva Nº 11 encontrarán un pequeño resumen esquemático de las implicaciones de la propuesta de Putnam.

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Para cuadrar las cuentas

Como ya empiezan a sonar tijeretazos de recortes, aunque pospongan concretarlos hasta después de las elecciones madrileñas, creo que es buen momento para volver a las cuentas de la pirámide y evitar que mucho más mucho sume muchísimo, quedándonos todos tan anchos.

La idea, a mi entender, pasa por conseguir cien mil millones más al año, y eso, por ejemplo, puede hacerse subiendo la recaudación cincuenta mil millones y bajando el gasto otros cincuenta mil millones.

Todo lo que no sea sumar por un lado y restar por otro es simple voluntarismo. Y no un año, sino varios años seguidos.

Para recaudar más, hay que subir los impuestos, empezando por los ricos. Vale. Pongamos que de los ricos podamos sacar diez mil millones. Todos sabemos que es una cifra muy optimista, pero la damos por buena.

Faltan cuarenta mil millones. ¿Cómo seguimos?

Tasas verdes, digitales, a las bebidas azucaradas, a los chicles de fresa, a los combustibles fósiles, a los implantes de mama. Lo que queráis. Esos son impuestos que van a ir sobre la gente de a pie, porque las empresas los van a trasladar casi automáticamente. ¿Nos ponemos generosos y decimos que sacamos de ahí veinte mil millones? Es una locura, pero vale.

Nos faltan veinte mil millones aún .

Sí, lo habéis adivinado: IRPF e IVA. De ahí va a salir lo que falte. Que no lo dude nadie.

Hemos completado el aumento de ingresos realista. Parece difícil y propenso a montar follones. Pero esperad, que aún falta lo bueno: quitar.

¿De dónde quitamos cincuenta mil millones? Y me refiero a partidas que sumen algo, sin esas mamonadas típicas de los sueldos de los políticos, y otros chocolates del loro. Pero vamos a empezar por ahí, para que no se diga. Todas esas cosas que molan aquí: sueldos de los políticos, coches oficiales, asignación de la Iglesia, de la Corona, y de la Hermandad de Adoradores de Franco. Como estoy que lo tiro, ponemos que de ahí hemos quitado diez mil millones, y no siquiera miro cuánta gente se ha quedado en el paro con este recorte, o cuanto habría que gastar por otro lado para cubrir los servicios cesantes. Lo doy por bueno, venga.

Nos faltan cuarenta mil millones por restar.

¿Cerramos empresas pública deficitarias? No, que eso es de fachas.

¿Recortamos prestaciones como el desempleo u otras similares? No, que eso es de fachas y de hijos de puta.

¿Bajamos los sueldos a los empleados públicos? Menos aún, que eso es de fachas, de hijos de puta y de envidiosos.

¿Bajamos las pensiones? Eso es lo peor de todo, porque es de fachas, de hijos de puta, de envidiosos y de psicópatas.

Quedamos en que sanidad, seguridad, educación y justicia es mejor no tocarlas. Vale.

¿Y qué queda?

¡Defensa! Vale. Le metemos un hachazo del 50 %, a riesgo de generarle tentaciones a algún vecino majete. Bueno. Hemos recortado cinco mil millones.

Nos quedan treinta y cinco mil millones por ahorrar.

¿Tratamos de reducir el gasto autonómico coordinando suministros y evitando duplicidades? No, espera, que eso es de fachas, imperialistas, centralistas y cavernícolas.

¿Qué más nos queda?

Pues ya veremos, pero resulta que la decisión hay que tomarla. Así que sabéis por qué alguno dejó el sillón: para que la decisión la tome otro.

Olía a naufragio, me temo.

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La vida te da sorpresas... Con permiso de Rubén Blades, de M. Messer, Bertolt Brecht y de K. Weill

Por la esquina del viejo barrio lo vi pasar

Con el tumbao' que tienen los guapos al caminar

Las manos siempre en los bolsillos de su gabán

Pa' que no sepan en cuál de ellas lleva el puñal

Usa un sombrero de ala ancha de medio lao'

Y zapatillas por si hay problemas salir volao'

Lentes oscuros pa' que no sepan qué está mirando

Y un diente de oro que cuando ríe se ve brillando

Como a tres cuadras de aquella esquina una mujer

Va recorriendo la acera entera por quinta vez

Y en un zaguán entra y se da un trago para olvidar

Que el día está flojo y no hay clientes pa' trabajar

Un carro pasa muy despasito por la avenida

No tiene marcas pero sabemos ques' policia

Pedro Navaja las manos siempre dentro 'el gabán

Mira y sonríe y el diente de oro vuelve a brillar

Mientras camina pasa la vista de esquina a esquina

No se ve un alma está desierta toda la avenida

Cuando de pronto esa mujer sale del zaguán

Y Pedro Navaja aprieta un puño dentro 'el gabán

Mira pa' un lado mira pal' otro y no ve a nadie

Y a la carrera pero sin ruido cruza la calle

Y mientras tanto en la otra acera va esa mujer

Refunfuñando pues no hizo pesos con qué comer

Mientras camina del viejo abrigo saca un revolver, esa mujer

Iba a guardarlo en su cartera pa' que no estorbe

Un trenta y ocho esmithanhueson del especial

Que carga encima pa' que la libre de todo mal

Y Pedro Navaja puñal en mano le fue pa' encima

El diente de oro iba alumbrando toa' la avenida

Hizo fácil

Mientras reía el puñal le hundía sin compasión

Cuando de pronto sonó un disparo como un cañón

Y Pedro Navaja cayó en la acera mientras veía, a esa mujer

Que revolver en mano y de muerte herida ahí le decía

Yo que pensaba 'hoy no es mi día estoy salá'

Pero Pedro Navaja tu estás peor, no estas en na'

Y creanme gente que aunque hubo ruido nadie salió

No hubo curiosos, no hubo preguntas, nadie lloró

Sólo un borracho con los dos cuerpos se tropezó

Cogió el revolver, el puñal, los pesos y se marchó

Y tropezando se fue cantando desafinao'

El coro que aquí les traje y da el mensaje de mi canción

La vida te da sorpresas

Sorpresas te da la vida, ay, dios

Pedró Navaja, matón de esquina

Quien a hierro mata, a hierro termina

La vida te da sorpresas

Sorpresas te da la vida, ay, dios

Valiente pescador, al anzuelo que tiraste

En vez de una sardina, a un tiburón enganchaste

La vida te da sorpresas

Sorpresas te da la vida, ay, dios

Como decía mi abuelita

El que último ríe, se ríe mejor

***

Wiki: «Pedro Navaja» es una canción de salsa compuesta por el músico panameño Rubén Blades e interpretada por él mismo junto con Willie Colón en 1978 y forma parte del álbum Siembra, el disco más vendido de la historia de la salsa. La canción trata sobre un proxeneta y hampón con ese apodo y fue inspirada en la canción de jazz popularizada en inglés en 1956 como Mack the Knife por Louis Armstrong, que a su vez es una adaptación de la canción alemana de 1928 Mackie Messer, de Bertolt Brecht y Kurt Weill.

***

www.youtube.com/watch?v=UibAE_x6NM8

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II Reto en Menéame: no ser el doble de bestias cuando terminemos el reto de ser normales

Hoy nuestro querido compañero @PasaPollo ha publicado un reto personal y nos ha invitado a seguirle aquí:

www.meneame.net/go?id=3507650

Como ya nos conocemos, me gustaría proponer este nuevo reto, post-reto o como queramos llamarlo basado en un sencillo decálogo:

1. Pase lo que pase nos comprometemos a que una vez terminado el reto de ser normales, volveremos a un estado de "asalvajamiento" como máximo igual o menor que el anterior al reto.

2. No crearemos artículos lacrimógenos explicando como la realidad no se plegó a nuestros deseos, ni el mundo se convirtió en un lugar mejor a pesar de los casi cinco titánicos minutos que aguantamos intentando ser normales.

3. No crearemos un sub invitando a otros meneantes a escribir los artículos mencionados en el punto dos.

4. No culparemos a @PasaPollo ni a su sensual lengua de serpiente labia de habernos hecho creer que podíamos cambiar el mundo para acabar volviendo al redil con más sed de sangre que antes.

5. Como último recurso y si no somos capaces de asumir la cruda realidad, culparemos a los admins que siempre tienen la culpa de todo.

6. Tras el primer strike, como es costumbre volveremos con otro nick y ahora ya sí podremos culpar a los admins con motivo.

7. Con el segundo y sucesivos strikes se le va cogiendo el gustito.

8. ¿Hemos escrito ya un artículo en el sub |Mi_strike?

9. ¿Y ahora?

10. Goto 5

Suerte a todos

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Pensamientos volcados sin mucho orden sobre los SUV

Es mi primer artículo así que espero que no seáis muy duros.

Lo primero que me gustaría hacer es una clasificación y es que no todos los SUV son iguales:

  • SUV con capacidades todocamino* completas: hablamos de coches generalmente de gama alta y muy caros como Mercedes ML, BMW X5/X6, Porsche Cayenne, Volkswagen Touareg etc. Son vehículos con tracción total de serie, control de descenso, grandes cilindradas, algunos con reductora etc.
  • SUV con capacidades todocamino* medias: aquí entran los "que sí pero no" buenos vehículos como el BMW X2/X3, Volkswagen Tiguan, Ford Kuga, Nissan Qasqai etc. Buena altura pero tracción 4x2 (habitualmente), peor suspensión etc.
  • SUV que intentan parecer un todo terreno: aquí meto en el saco a muchos pero obviamente hay grandes diferencias entre un Volkswagen T-Roc y un Fiat 500X o un Renault Captur.

(*los he llamado todo camino por que si bien por monte y demás pueden ir sin problema obviamente no suben por donde un Suzuki Jimmy o similar)

En definitiva que meter en el mismo saco a un Mercedes ML y a un Dacia Sandero es un sinsentido.

El primer grupo son vehículos carísimos y con alto consumo, y sí por ese precio, o seguramente menos, puedes comprar una berlina de lujo etc, pero diga el meneante medio lo que diga son coches buenísimos en muchos aspectos, punto, no se puede opinar. Son tremendamente fiables, interiores de lujo, cómodos... Alguno tan denostado como el Cayenne son auténticas joyas de la ingeniería, eso sí pagados a un precio que no todos los bolsillos se pueden permitir. Además cuentan con todas las prestaciones de un vehículo de lujo de serie como sensores de todo tipo, equipaciones de audio de gama alta, asientos de cuero y demás. Aquí me gustaría comentar que a veces ocurren cosas a las que no le encuentro ningún sentido como que el Bmw X6 hasta hace pocos años sólo se fabricaba en 4 plazas, ¡un coche de 5m y +2000 kilos sólo podía transportar a 4 personas! sin embargo su hermano menos "deportivo", pero de igual tamaño, el X5 dispone de hasta 7 plazas.

El segundo grupo siguen siendo caros pero el consumo ya es más razonable, buenos coches pero comentaba no es buena idea intentar utilizarlos como todoterreno, para ir por caminos dan bastante el pego y puede ser una opción para el medio rural si quieres un coche de buena apariencia (unos más que otros) y no dejarte los bajos con las piedras de los caminos. Cuidado no sólo cambian el tamaño, potencia etc, en las marcas premium los acabados de este grupo están muy por debajo de los del primero.

El tercero es simplemente una moda estética, no hay más, pero también con mejor acceso que un coche "normal".

Ahora hablemos sobre esos accesos, es una de las "escusas" que más se utilizan para comprar un SUV. Es cierto que el acceso para personas con problemas de movilidad es mejor en los SUV, salvo en los del primer grupo, y es que hay algo que mucha gente no se plantea subirse a un mostrenco de esos si no tienes una altura mínima o cierta agilidad no es fácil ni cómodo por mucho que lo quieran vender así, así que si lo quieres por temas de acceso y mides menos de 1.75 (por decir algo) NO deberías comprarte uno de estos, de cualquiera de las otras dos gamas será mejor opción.

Otra de las razones suele ser la visibilidad y ahí el meneante ibérico suele decir que tapan la visibilidad del resto de vehículos a cambio de ganar ellos, y tiene sentido, pero solo en ciudad, hay que recordar que mucha gente no vivimos en el centro de una gran ciudad y el cambio de visibilidad también se nota en carretera (en autovía la verdad es que es irrelevante) así que la mejora de la visibilidad es importante o no dependiendo de donde vivas y el uso que le vayas a dar al vehículo.

Capacidad de carga, algunos especialmente del grupo 3 son demenciales, tienen menos capacidad que una berlina tradicional, sinceramente no lo entiendo, compras un coche relativamente grande y te dan un maletero ridícuo ¿No habría tenido sentido reorganizarlo o al menos alargarlo unos cm más para darle más maletero? ¿Si ya es grande que más da? Los del grupo 1 en ese sentido son auténticas bestias con una capacidad de carga similar a una furgoneta pequeña (sí, ya se que para eso te compras una furgo pero no es de lo que estamos hablando).

Sigamos con el consumo: por razones obvias como son el peso y la carga aerodinámica un SUV siempre va a consumir más que su equivalente en coche normal, así que tampoco creo que sean una buena compra si vas a hacer muchos Km.

Aparcamiento, cuidado con esto y es que los del grupo 1 no entran en cualquier garaje, son coches no solo muy largos si no que también bastante más anchos de lo normal (unos 15-20 cm que se notan).

En definitiva, que no todos los SUV son iguales pero ni de cerca y el si es una compra correcta o no sólo se puede evaluar mirando el caso de cada persona y es que no todo el mundo vive en el centro de Madrid.

Ahora paso a contaros mi experiencia personal y por qué cambié una berlina (Alfa Romeo) por un SUV (BMW X5). La primera razón no voy a ser hipócrita y es por que quise, habrá gente que lo critíque por el gasto o por lo que sea pero mi economía me lo permitía hacer sin problema y al final es mi dinero, al final la compra de un coche siempre tiene un alto porcentaje de decisión emocional, dicho esto voy a dar una serie de razones más cabales:

  • Hago pocos Km (menos de 10.000) al año de modo que el consumo no es un problema, además en autovía no es tan alto (en marchas bajas sí es una barbaridad), cuando necesitamos ir al super o alguna cosa tenemos también un coche pequeño.
  • Es caro pero una berlina con unos acabados similares no es mucho más barata, y el precio residual para venta en segunda mano, al menos de momento, es mucho mayor.
  • Esos Km se dividen básicamente en 2 tipos autovía para ir de vacaciones etc o visitar a la familia en el pueblo y para ver a parte de ella tengo que ir sí o sí varios Km por caminos, esto además hace que aunque me lo planteé la opción de un coche eléctrico no era viable para mí ya que los viajes que hago se me irían de la autonomía en el 90% de los casos.
  • Por autovía tiene una estabilidad buenísima y el motor responde muy muy bien, por camino va incluso mejor que algunos todo terreno de mi familia (Grand Cherokee).
  • Mi mujer algunas veces necesita mover material voluminoso y lo que hacíamos era alquilar una furgonetilla, en este me entra cualquier cosa de menos de 2m y no he vuelto a necesitarlo.
  • Esos Km se dividen básicamente en 2 tipos autovía para ir de vacaciones etc o visitar a la familia en el pueblo y para ver a parte de ella tengo que ir sí o sí varios Km por caminos, creo que en dos años lo habré metido 5-6 veces en la ciudad. Además somos muy aficionados a los festivales y si no hay sitio alguna vez lo hemos utilizado para dormir metiendo un colchón entero atrás.

Me gustaría leer vuestras opiniones más allá del "usa el transporte público" o "eso es que tienes el pito pequeño".

Un saludo!

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Mensaje viral de uno de los jóvenes "secuestrados" en Palma

Mensaje viral de uno de los jóvenes "secuestrados" en Palma

Me ha llegado este whatsapp de uno de los jóvenes confinados por el macrobrote en Palma de Mallorca y creo que se le debe dar la mayor difusión.

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De la libertad

Alguien por aquí decía que las obviedades no hay que explicarlas. Yo diría que sí:

"¡No digas que lo que digo yo está mal, estás coartando mi libertad de expresión!"

No, mire usted: que alguien diga que su opinión no le gusta no coarta su libertad de expresión. En realidad, esa otra persona esta ejerciendo la suya. La libertad de expresión va en ambos sentidos: usted dice lo que quiere, y el otro también. Además, sepa usted que lo respetable son las personas, no las opiniones. De hecho, hay opiniones que son una puta mierda. Y estoy tan en mi derecho de expresar ese rechazo como esa otra persona de soltar basura por su boca.

"¡No dibujes cosas que ofenden mi religión, estás coartando mi libertad religiosa!"

No, mire usted, volvemos a lo de antes: que alguien dibuje algo que no le gusta y que hace referencia a su religión (o que usted cree que hace referencia a su religión) no coarta su libertad de creer en lo que usted quiera, puede usted seguir haciéndolo mientras lo desee, diga lo que diga quien sea: nada de lo que diga cualquier otro puede hacer que usted deje de ser religioso si usted quiere seguir siéndolo. Esa otra persona está ejerciendo también un derecho, el de libertad de expresión.

"¡No me obligues a llevar mascarilla, o a quedarme en casa, estas coartando MI LIBERTAD!"

No, mire usted: la libertad no es hacer lo que le dé la gana porque yo lo valgo. Puede que a usted no le gusten, pero hay leyes, se toman medidas, se pide la colaboración de la ciudadanía en ciertas situaciones de emergencia, como la actual.

Y, por favor, no insulte usted mi inteligencia haciendo referencia a "la ley natural" cuando se habla de libertad, como me comentó hace unos días alguien al que le molestaba que otras personas ejercieran su libertad para hacer cosas que no dañaban a nadie y estaban dentro de la ley, pero que a esa persona no le gustaban, como dos hombres casándose entre ellos. Mi respuesta fue que, según "la ley natural", que puede ser también "la del más fuerte", yo podría ir a su casa, arrancarle la cabeza de una garrotazo y quedarme con sus bienes. ¿Bien así? ¿O prefería él, tal vez, que hubiera leyes humanas? No lo sé, porque no contestó…

La libertad es como un superpoder, le permite hacer a usted muchas cosas que en otras circunstancias y países no podría, y ya sabe usted lo que decía el tío de Spiderman:

"Todo gran poder conlleva una gran responsabilidad."

Esa "gran responsabilidad" se traduce, por ejemplo, en colaborar en un esfuerzo común en una situación de emergencia. Y ejercer ese superpoder le va a exigir, además, un esfuerzo: el de informarse, el de no creerse bulos, el de averiguar si los datos que le dan otros son ciertos o no, para, con la información suficiente, poder ejercer ese superpoder con responsabilidad. Y entonces, siempre que no dañe usted a nadie y cumpla con las leyes que han aprobado el Parlamento del país, podrá hacer usted lo que quiera, dentro de esos límites.

En resumidas cuentas, la libertad no es "yo hago lo que quiero, pero no se te ocurra hacer nada que me moleste o disguste, o estarás atacando mi libertad". No, mire usted: resulta que usted puede ejercer su libertad, pero los demás también.

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Agorainflación. Una visión de la actuación del BCE

Agorainflación. Una visión de la actuación del BCE

Nos dice la RAE que “agüero” es el procedimiento o práctica adivinatoria, utilizada en la antigüedad por pueblos supersticiosos, y que se basaba principalmente en la interpretación de señales, véase el canto o vuelo de las aves, ciertos fenómenos meteorológicos, etc... De “agüero” aparece otra palabra, “agorero”, esta con cierta connotación negativa, pues se dice de aquel que anuncia o predice males o desgracias.

El caso es que si hacemos caso a la RAE la palabra “agüero” pareciera solo remitirnos a antiguas y olvidadas prácticas supersticiosas. Pues bien, yo les digo que en lo referente a la economía, esta disciplina donde parece obligación para algunos adivinar y afirmar con sospechosa rotundidad un trágico futuro, agüeros y agoreros a golpe de twit, titular o vídeo en Youtube están bien presentes hoy en día: chamanes y arúspices que aseguran ver en cierta señal, índice o tendencia el futuro. Y si bien prever en base a datos e intentar adelantarse a los acontecimientos parece ser algo necesario en toda nuestra actividad, como no en el análisis económico, no deja de ser curioso la repetida insistencia por parte de algunos de estos oráculos en anunciarnos el segundo advenimiento y el paseo de los cuatro jinetes.

El malvado BCE. Cuestión de compromiso.

Y así resulta que este que les escribe, uno que siempre fue crítico con el papel y sobre todo las vías de actuación asignadas al BCE de Maastricht, va a tener que romper una lanza a favor de este organismo, aun a riesgo de tener que abrir el paraguas, justo en un momento en que la actuación de este se ve seriamente, y no sin razones, criticada. ¿Por qué elegir un mal mayor pudiendo elegir uno menor? La economía, en tanto que es política, siempre es una cuestión de compromiso en el resultado y no de máximos.  

Ustedes ya conocen los sermones de nuestros pastores con esta institución y lo que el futuro nos depara, aquí mismo en Menéame se leen a diario: el malvado Banco Central, formalización institucional de henchidos burócratas, se comportaría siempre con una sorprendente imprudencia financiera al abusar, con su poder monopolístico, de la elasticidad crediticia que permite una moneda fiat, el euro, siendo así que con el fin de mantener las insostenibles deudas soberanas, este se vería a la larga abocado a recurrir a un continuo proceso inflacionario en aceleración, impresora mediante, cosa que iría en sentido contrario al principal cometido de la entidad, que no es otro que el control de precios y supervisión de la entidades de crédito.

Y uno estará de acuerdo con muchas de las cosas anteriormente presentadas. Sí, el BCE es una institución de corte eminentemente burócrata, con todos los problemas asociados a este tipo de elefantes y su distancia del mundanal presente. Sí, es monopolística, si así queremos llamarlo (por eso se llama “Central”), en tanto actúa a la postre como árbitro de plazos y riesgos (si bien por otro lado pudiera parecer exagerado llamar monopolio a un Central que permite que más del 90% del dinero se realiza a través de la banca privada y la demanda de crédito). Sí, ha demostrado una más que dudosa competencia como controlador del riesgo al crédito en el mercado, a la vez que viene pareciendo su actuación como única solución momentánea a las deudas soberanas... y muchas otras vergüenzas de las que no dejaremos aquí mayores comentarios que estos: la tendencia que un banco central fiat crea en el mercado crediticio para trabajar sin liquidez, las vías mediante las cuales lanza sus estímulos, su inexistente voluntad de evitar una sobrefinanciarización de la economía, una sospechosa incapacidad o confirmada complacencia en no hacer llegar estos estímulos a eso que llamamos coloquialmente “economía real”, etc... El BCE, como cualquier central, presenta problemas de base y de funcionamiento, y no pequeños (también solemos, por otro lado, responsabilizarle de asuntos de los que no tiene competencia). Pero de esto a afirmar que la acción del BCE aboca a un continuo proceso inflacionario que nos llevará, en caso de no eliminar tal institución, a la llegada de los ciento cuarenta y cuatro mil elegidos, abogando así algunos por tiempos pretéritos hay un paso importante. 

No deberíamos nunca tirarnos a los brazos de la ortodoxia y doctrina oficial, siempre connivente y afanada en conseguir ciertos intereses espurios, siempre indolente con quien decidió sacrificar, actor este BCE de el flujo y concentración actual de rentas. La economía en tanto disciplina que no se cierra categorialmente es en el fondo política, y la política siempre es una cuestión de intereses, por lo que la crítica, alternativas, resistencia y presentación de contrapartidas siempre son más que necesarias. Pero también debemos advertir que no es nada nuevo esto de que cierta heterodoxia de uno y otro lado, siempre simpática en épocas complejas, asome la nariz en cada crisis para anunciarnos el fin del bloque histórico. Y un momento en el que confluiría una política de estímulo por parte del BCE junto a un aumento de, por un lado de la demanda tras la crisis del Covid-19 y por otro, de costes en materias primas, energía y en la cadena de distribución (vaya combo) es una oportunidad magnifica para la evangelización. Recuerden que los cristiandad creció con la profecía milenarista. No se trata aquí de poner paños calientes a la actual situación: el repunte de precios es una realidad que parece se va a mantener al menos algún tiempo, y nuestros bolsillos la van a notar, vaya. El temor se adueña de nosotros, y existen razones para ello. Seguro que muchos de estos apocalípticos heterodoxos presentan sus advertencias con sincera voluntad, y solo el tiempo nos dirá como se desarrollará ese futuro, siempre nebuloso para los mortales (yo les reconozco desconocerlo, estando lejos de esa rotundidad mostrada por algunos). Pero no tengamos dudas de que detrás de las filípicas de muchos otros se esconden espurios intereses ya bien conocidos. Sobre todo cuando, curiosamente, sus críticas van siempre dirigidas hacia ciertas instituciones pero por otro lado glorifican otros agentes operativos del mercado que tendrían tanta o más culpa de la situación que el BCE.

Agorainflación: evolución de la inflación en la zona €, una visión internacional.

 “El futuro influye tanto en el presente como en el pasado” (Nietzsche)

Pero dejemos por un momento el incierto futuro y centrémonos en lo conocido: ¿es verdad que la entrada del BCE ha significado un aumento acelerado de la inflación?, ¿cómo se ha comportado históricamente la estabilidad de precios antes y después de la aparición del BCE en los países ahora de la zona euro y en España?, ¿es la inflación, eso que algunos llaman “el ladrón más sutil”, la principal causa objetiva de pérdida de poder adquisitivo desde la entrada del BCE? Se suele decir que la inflación y la deflación son los dos principales enemigos de los economistas. Las perniciosas consecuencias que cualquiera de estos dos fenómenos pudieran tener en el caso de descontrolarse son conocidas, y no voy ahora a entrar en detalle de estas, pues si han llegado hasta aquí supongo que ustedes ya las conocerán. Pero a esos dos fenómenos añadiré ahora un tercero, acaso igual o más peligroso, este que he venido a llamar “Agorainflación”: el pánico infundido y anunciado. Y es que la importancia de las expectativas a futuro para la economía marcan las acciones del presente.

En la siguiente gráfica observarán la evolución histórica del IPC [1] para los países de la zona euro desde 1960 hasta 2021:

La línea vertical que pueden encontrar en 1999 marca el año de comienzo del mandato del BCE a plena competencia (si bien ya desde principio de los 90 comenzaría la cooperación monetaria europea). Las líneas sombreadas refieren a los periodos de recesión económica (pues pudiera ser interesante saber como se comportan los precios en épocas de crisis). Se acompaña así la gráfica con algunos datos muy sencillos que nos permitirán comparar la evolución de la inflación antes y después de la entrada del BCE.

Un rápido vistazo a la gráfica habla por sí solo: mientras la media anual del IPC antes de la entrada del BCE se situaba en más de un 5,5%, con especial relevancia en este dato del proceso inflacionario de los años 70 (más abajo comentaré sobre esto), el promedio bajo la gestión del BCE se sitúa en un 1,88% (cumpliendo el BCE por el momento su objetivo de un 2%). Mientras la tendencia de la inflación de 1960 a 1999 era plana, la tendencia con el mandato del BCE era una rebaja media de inflación a un ritmo de un -0,7% anual. Y por el lado de la estabilidad, la desviación del primer periodo resulta en más de 3 veces la demostrada por el segundo (3,4% Vs.1,1% ). Y todo esto incluyendo ya el año 2021 con un 3,4% de inflación (dato cierre de septiembre).

Agorainflación: evolución inflación en España, una visión local.

Misma gráfica, ahora para España. De nuevo una simple mirada resulta reveladora: un promedio anual de inflación más de 4 veces superior antes del BCE a después (8,76% Vs. 2,08%), de nuevo con una especial incidencia de la crisis de los 70 en la comparativa. Una tendencia negativa que duplica en ritmo la parte BCE. Y una estabilidad de precios casi cuatro veces superior (5,71% Vs. 1,51%). De nuevo todos estos datos incluyendo ya un 4% de inflación para 2021 (dato a cierre de septiembre).

¿Demuestra por tanto la acción del BCE esa “tendencia a la inflación” tan cacareada por algunos? Lo cierto es que los datos fríos de lo conocido no demuestran tal afirmación: tanto el promedio anual, como la tendencia (siempre negativa y con mayor pendiente que el anterior periodo) nos dicen lo contrario, mientras la estabilidad de precios sería mucho mayor con el BCE. 

Dicho esto, debemos aquí reconocer que desde la entrada del BCE, no parece que la economía se haya tenido que enfrentar, al menos por el momento, veremos ahora, a un proceso inflacionario como el propio de los años 70 con la famosa “crisis del petróleo”. Al fin y al cabo, si hoy sabemos que la política monetaria es de máxima importancia para el devenir económico general (y esa crisis de los 70 bien nos lo mostró), suelen ser otros motivos más materiales los causantes de las principales distorsiones en la evolución de precios. Recuerden que procesos inflacionarios han existido a lo largo de toda la historia, antes y después de la llegada de los bancos centrales, y a muchos les sorprendería saber que la inflación es un proceso que se da en todo ser vivo, no solo el humano. Por otro lado, en lo referente a la inflación, podemos decir que el mandato del BCE se ha tenido que enfrentar a una crisis financiera tan importante como la del 2008, contestando a esta con una fuerte política de estímulos (impresión moneda y compra de deuda soberana a tipos reducidos) para intentar paliar los efectos de esta recesión, sin resultar esto en un proceso inflacionista, más bien al contrario como podemos ver en la gráfica, negando la máxima “impresión de dinero = inflación” (las razones de esto son varias, posiblemente relacionadas con algunos de esos pecados del BCE que comentábamos más arriba, sobrefinanciarización de la economía, y en cualquier caso están todavía siendo estudiadas). Y aun si excluyésemos del análisis el periodo inflacionario de los 70 el mandato del BCE mostraría una menor inflación y una mayor estabilidad.

Por otro lado soy plenamente consciente del simplismo que puede resultar presentar estos datos sin conectarlos con otros, si bien espero que el lector me disculpe, pues el objeto de este artículo es advertir sobre lo tal vez exagerado de algunas afirmaciones que se vienen presentando en los últimos meses, proporcionando una simple y rápida mirada a nuestra reciente historia en lo relativo a la evolución de precios, y no un sesudo análisis de situación. Pareciera que en ocasiones olvidamos que la política o sistema monetario no debería ser un fin en sí mismo, sino un medio. Atender solo a la evolución de precios, o argumentar que el euro se devalúa frente al oro u otros activos, como tanto y tanto se insiste por algunos, no deja de ser en cierto modo una irrelevancia frente a otras cuestiones: ¿es este o aquel sistema más o menos estable, más o menos resiliente o volátil frente a las crisis?, ¿cómo conecta con la renta y la capacidad de consumo?, ¿cómo se comporta frente a las fricciones del mercado?, ¿qué relación tiene con la deuda pública y privada?. Y sobre todo, ¿cuánto es debido a la política monetaria y cuanto no?, ¿superan las alternativas a todo esto?... Posiblemente sean en la capacidad que tengamos de conectar estas cuestiones donde encontremos los problemas endémicos de nuestras economías, y no en la simple actuación del BCE, la política monetaria o la evolución de precios. Cuestiones esas otras de las que sospechosamente muchos no parecen denunciar con tanto ahínco, más bien en ocasiones las toman como algo “natural” (que bien eso de naturalizar ciertos problemas y humanizar otros, ¿verdad?...).

Si el actual repunte de los precios que vivimos a nivel global en este 2021 es la antesala de una nueva crisis inflacionaria, o si por el contrario solo será una situación circunstancial, nos será revelado según pase el tiempo. Yo les insisto en que desconozco la respuesta. Sin duda el repunte de este 2021, parece ya difícil que no se prolongue al menos a buena parte del 2022, alineándose, como veíamos más arriba, un aumento de demanda tras la crisis del Covid, un aumento de costes de materias primas y energía, junto con un reajuste de costes en la cadena de distribución, situación que nos debe poner alerta. Y mucho. Pero levantar las manos y empezar a correr en círculos, despotricando día sí y día también contra la política de un Central que, al menos por el momento, demuestra un cierto control sobre precios, o hablando ya de proceso “hiperinflacionario” como algunos ya se han lanzado a decir (investiguen ustedes lo que es técnicamente una hiperinflación y valoren si los datos que conocemos nos apuntan a ello) pareciera más propio, al menos todavía, de ser víctima del momento que de una reflexión serena a la luz de los datos conocidos. O de algo peor.

Abro paraguas...

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[1] Una viejo debate entorno al índice de precios es hasta qué punto el IPC es un correcto indicador para medir la evolución de los precios. El IPC mide la evolución del precio de una serie de artículos, cosa que deja fuera del calculo otras, con las consecuentes distorsiones que esto podría acarrear. Si aquí se ha dado detalle del IPC es porque 1) es el índice utilizado de forma estándar para medir la evolución de precios 2) incluye la evolución de precios de alimentos no procesados y energía (a diferencia del “IPC subyacente”), algo importante a conocer dada la actual coyuntura y 3) fuera del IPC (sea armonizado, deflactado o subyacente) no existe ningún índice estandarizado y de aceptación 4) nos permite conocer el índice de precios de los productos y servicios que se consideran como recurrentes, dejando fuera mercados residuales que podrían desvirtuar el calculo (por ejemplo, el evolución de precios de los yates poco importa a nivel general).

[2] Como me dicen que escribo artículos demasiado largos para esto de la internete (y tienen razón, como ven soy incapaz de hacerlos más cortos), dejaré tal vez para otro día la incidencia de la inflación en el poder adquisitivo del asalariado medio. Más que otra cosa para que veamos todos juntos si es verdad eso de que la inflación es lo que más ha venido afectando a su poder adquisitivo, o más bien fueran otros motivos sobre los que, curiosamente, no parecen algunos publicitar tanto, sino defenderlos. De aperitivo:

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Meritocracia: ¿mito o realidad?

Meritocracia: ¿mito o realidad?

La palabra meritocracia se ha popularizado mucho en los últimos tiempos. Su significado literal hace referencia al “gobierno de los mejores”, es decir, los “mejores” son los que accederían a las altas esferas de la política para gobernarnos a todos. En su día, en la antigua Grecia, se presentó algo similar: la “aristocracia”, es decir, un gobierno que recaería en unas pocas personas, las cuales serían las más preparadas y capaces. Sin embargo, a día de hoy, cuando hablamos de meritocracia no nos estamos refiriendo a al “gobierno de los mejores”, sino a la idea de que en la vida es posible mejorar mediante el esfuerzo y el talento.

Podríamos decir que hubiese dos posturas extremas encontradas en referencia a esta última acepción: por un lado, están los que devalúan el concepto: para ellos la meritocracia es un timo, da igual lo que te esfuerces porque el que es pobre se morirá siendo pobre, el que no ha heredado de los padres, por mucho que se esfuerce, no podrá ascender ni económica ni socialmente. Por el otro lado, están los que idealizan el concepto. La mejor imagen es la clásica historia del chico que empieza en la empresa como botones, y después de mucho esfuerzo, termina siendo el jefe de la misma. Para estas personas, el esfuerzo, el talento y el trabajo duro, siempre tendrán su recompensa.

Ambas posturas pecan de lo mismo: de ser extremistas; sin embargo, esto no quiere decir que ambas no tengan algo de verdad. Como diría Aristóteles: “en el término medio está la virtud”. Pregúntate algo: todo lo que has conseguido en tu vida —el capital acumulado, tu puesto de trabajo, tu casa (ya sea en propiedad o en alquiler)— ¿te vino dado por los azares de la vida o realmente tú tienes algo de mérito en todo eso?

El problema de la meritocracia es que la utilizamos para compararnos con los que más tienen. La comparación ha de ser utilizada de una manera justa, y no es justo que uno se compare a sí mismo con personas multimillonarias. Si alguien empieza a jugar a baloncesto, no puede compararse con Michael Jordan, tiene que compararme con la gente que está a su nivel. Pero, sobre todo, uno ha de compararse con su “yo” del pasado (de hecho esta debería ser la única comparación). Uno debe mirarse a sí mismo y preguntarse: ¿soy mejor en esto de lo que era ayer? ¿He evolucionado? Y si uno se esfuerza en la dirección adecuada (cuidado, porque esforzarse en la dirección equivocada puede conllevar a seguir igual o incluso empeorar la situación) difícil es que uno, con paciencia, no pueda ver una mejora en sí mismo en cualquier área de la vida. Pero si nos ponemos como meta ser Amancio Ortega o pasar de botones a jefe de la empresa, lógicamente, nos frustraremos y pensaremos que la meritocracia son los padres.

Por otro lado, no pretendo dar a entender que si las personas no evolucionan eso es porque no se esfuerzan lo suficiente. Como diría Íñigo Errejón:

Ha dicho un diputado de la derecha que la igualdad en una sociedad libre es imposible porque tenemos talentos y esfuerzos diferentes. Hay que tener la cara muy dura, porque esto lo que significa es que los ricos lo son porque se esfuerzan más y tienen más talento y los pobres son pobres porque se esfuerzan menos o porque tienen menos talento.

La postura que sostiene una meritocracia idealizada sostendrá que, efectivamente, los ricos son ricos porque se esfuerzan y tienen talento y los pobres son pobres porque no lo hacen. Sostener esto, efectivamente, es tener la cara muy dura, pero igual de dura es la cara del que sostiene el argumento de la meritocracia devaluada: “la responsabilidad de mi fracaso nunca dependerá de mí, sino de las circunstancias”. En psicología se utiliza el término locus de control para hacer referencia al grado en que las personas sienten que tienen el control de lo que ocurre en sus vidas. Los dos extremos de locus de control son interno y externo. El locus de control interno sería:

La percepción del sujeto de que los eventos ocurren principalmente como efecto de sus propias acciones, es decir, la percepción de que él mismo controla su vida. Tal persona valora positivamente el esfuerzo, la habilidad y responsabilidad personal.

El locus de control externo sería:

La percepción del sujeto de que los eventos ocurren como resultado del azar, el destino, la suerte o el poder y decisiones de otros. Así, el LC externo es la percepción de que los eventos no tienen relación con el propio desempeño, es decir, que los eventos no pueden ser controlados por esfuerzo y dedicación propia. Tal persona se caracteriza por atribuir méritos y responsabilidades principalmente a otras personas.

La escala de medición de Rotter establece diferencias entre las características personales de los individuos que se inclinan hacia un polo o hacia el otro. Hacia el polo del locus de control interno:

·       Es más probable que asuman la responsabilidad de sus acciones
·       Tienden a estar menos influenciados por las opiniones de otras personas
·       A menudo se desempeñan mejor en las tareas cuando se les permite trabajar a su propio ritmo
·       Por lo general, tiene un fuerte sentido de autoeficacia
·       Tienden a trabajar duro para lograr las cosas que quieren
·       Se sienten seguros frente a los desafíos
·       Tienden a ser físicamente más saludables
·       Informan ser más feliz y más independientes
·       A menudo lograr un mayor éxito en el lugar de trabajo

Hacia el polo del locus de control externo:

·       Culpan a las fuerzas externas por sus circunstancias
·       Cualquier posibilidad de éxito se basa en la suerte
·       No creen que pueden cambiar su situación mediante sus propios esfuerzos
·       Se sienten desesperanzados o incapaces de afrontar situaciones difíciles
·       Son más propensos a experimentar impotencia aprendida

La pregunta aquí sería si las características prototípicas de los individuos con un locus de control externo (y viceversa) vienen dadas porque las circunstancias externas y la imposibilidad de mejorar son tan reales que les han obligado a pensar y sentir de esta manera, o bien porque, esta forma de pensar y sentir tan negativa, al margen de las circunstancias externas, les lleva, como la profecía que se autocumple, a no poder mejorar. Supongamos que un equipo de fútbol —incluso con la injusta circunstancia de empezar perdiendo un partido 2 a 0—, pensase que es imposible ganar ese partido, que no hay nada que hacer. ¿Realmente creemos que ese equipo tendrá posibilidades de ganar el partido, o realmente esa actitud pesimista y victimizante, más allá de que puedan tener razón en sus reclamos y en sus percepciones de injusticia, les está dificultando a la hora de afrontar la situación? En otras palabras, no se trata de mirar hacia un lado y querer obviar que el equipo contrario empezó con una ventaja, sino que se trata de pensar: “a pesar de esa ventaja, ¿qué actitud debo tomar yo?”. Podría ser que este equipo, aun perdiendo 2-0 remontase el partido y terminase ganando, y esto sería por sus propios méritos, de hecho, tendría mucho más mérito que si el partido hubiese empezado en igualdad de condiciones.

En definitiva, cuando alguien no evoluciona (o no evoluciona lo que a él le gustaría) deberemos fijarnos cuánto de responsabilidad es de él y cuánto es del sistema, el ambiente, o las circunstancias. Averiguar la responsabilidad de uno (cuánto se está esforzando, si se está esforzando en la dirección adecuada, si se ha puesto unos objetivos demasiado elevados…) es de una importancia capital porque, en última instancia, lo único que podemos controlar verdaderamente es lo que hacemos nosotros. El sistema, por muy injusto que nos parezca, no lo podremos cambiar como a nosotros nos gustaría, por lo menos no de una manera directa. Si yo averiguo qué es en lo que estoy fallando, tengo el poder de cambiarlo, pero si yo averiguo (o creo averiguar) lo que está fallando en el sistema, cambiar eso no es tan sencillo y puede ser un gran foco de frustración porque también depende de las acciones de los demás.

No pretendo dar el típico sermón de la psicología positiva. Creo que uno sí que tiene el poder de cambiar las conductas de los demás, porque nuestras conductas no suceden en el vacío, sino que están influidas por las conductas de otros, de manera que, como diría Paul Watzlawick: “todo acto de comunicación es un acto de influencia”. De modo que, aunque sea a una pequeñísima escala, uno “puede cambiar el mundo”. El solo hecho de que estés leyendo esto, te está influyendo de algún modo, y en función de cómo esté redactando este texto, te “puedo conducir” (o puedo intentarlo) en una dirección o en otra. Esto se ve muy bien en las discusiones de pareja, en donde basta que uno de los dos adopte una postura diferente a la habitual para que la discusión se apague. Al fin y al cabo en las discusiones siempre suele haber una especie de escalada, donde el uno intenta imponerse al otro. Cualquiera de los dos que corte con esta actitud, conllevará, inexorablemente, a la disolución de la discusión. El problema es que nosotros desearíamos que fuese el otro el que tomase las riendas de la acción positiva, y eso no lo podemos controlar. Lo único que podemos controlar son nuestras acciones. No me parece mal el hecho de intentar cambiar las circunstancias que nos rodean, pero el control que tengamos a gran escala nunca será comparable con el control que tengamos sobre nosotros mismos. El inconformismo con el sistema es síntoma de inteligencia, pero el excesivo inconformismo con el sistema puede ser síntoma de locura, debido a que uno ha de intentar cabalgar entre ser sanamente inconformista y sanamente adaptativo. La persona que es inconformista con absolutamente todo, tiene un problema, y la persona que se adapta a absolutamente todo, tiene otro. Podríamos decir que un “inconformista adaptativo” es el mejor de los formatos, pues sabe qué batallas merece la pena pelear, en qué momentos y con qué intensidad, y sabe a qué circunstancias es mejor adaptarse y no luchar contra ellas.

Por otro lado, si la visión de la meritocracia devaluada fuese cierta, entonces ¿qué sentido tendría esforzarse en la vida? Cuando uno se esfuerza en la vida, lo hace para mejorarse a sí mismo. Por otro lado, si la visión de la meritocracia idealizada fuese cierta, entonces todos podríamos ser Amancio Ortega; sin embargo, esto no es cierto, porque para ser Amancio Ortega no solamente hace falta ser alguien que se esfuerce, sino que se han de dar una serie de circunstancias que nosotros no podemos controlar (ser hijo de…, tener dinero, tener contactos…). Es decir, para ser el dueño de Inditex sí es condición necesaria el esfuerzo, pero no es condición suficiente. Por eso, me gustaría subrayar, que no todo rico lo es a pesar de no haberse esforzado y ser un vago, sino al contrario, el hecho de haberse esforzado, junto con otra serie de factores que no poseemos el resto, probablemente, haya dado lugar a su riqueza, o, si ha sido heredada, al mantenimiento de la misma, porque las riquezas igual que vienen se pueden ir. Por ejemplo, ahora que Marta Ortega es la nueva presidenta de Inditex —que todos sabemos que el hecho de ser la hija de Amancio es un grandísimo empuje para llegar a serlo— la pondrá a prueba para ver si realmente es una persona que está capacitada y con esfuerzo y habilidad consigue mantener el buen rumbo del imperio de su padre, o bien es una persona que no sabe hacer la “o” con un canuto, que fue puesta a dedo simplemente por ser hija de, y conduce a la empresa del padre a un decaimiento.

Otro ejemplo: si Marc Zuckerberg no hubiese estudiado en Harvard probablemente no hubiese desarrollado Facebook; sin embargo, no todo el mundo que estudia en Harvard termina desarrollando Facebook o una aplicación similar; es decir, que Zuckerberg, a pesar de ser un privilegiado que pudo estudiar en Harvard, pudo sacar el provecho que muchos otros no pudieron para poder crear Facebook. Ahí está el talento, la inteligencia y el esfuerzo. ¿Y qué pasa con aquellos que tienen inteligencia, esfuerzo y talento y no pueden ir a Harvard? Probablemente nunca llegarán a ser como Marc Zuckerberg, pero la buena noticia es que nadie necesita ser como él. Esta es una mala comparación. Si realmente eres una persona que tienes un gran talento, una gran inteligencia y te esfuerzas, creo que difícil es que no puedas mejorar en la vida y tener una vida digna; probablemente, nunca llegarás a poseer el capital de Bill Gates, pero es que no es necesario para poder vivir bien. Recuerdo a una actriz del Me too que denunció a un productor porque tuvo que acostarse con él para poder participar en una gran producción. Más allá de que el tipo me pueda parecer un cerdo, lo que percibí en el momento es que la chica no tenía vocación de actriz, sino vocación de estrella. Su queja no era: “yo me esfuerzo, tengo un gran talento y no puedo actuar ni tan si quiera en un modesto teatro”. Su queja era: “para salir en esta superproducción —en la que yo tanto anhelo salir—he tenido que pasar por el aro de tener que acostarme con el productor. Podría no haberlo hecho y obtener un papel en una película mediana, pero como anhelo tanto la fama, como tengo tanta vocación de estrella, decidí pasar por el aro”. Lo mismo les pasa muchos veces a los que devalúan la meritocracia al 100%: pareciese que tuviesen vocación de millonarios, porque siempre son a estos a quienes ponen de ejemplo.

Por ejemplo, continuando con Errejón, este cita en su Twitter lo siguiente:

Este tweet tiene, a mi juicio, dos “errores”: el primero es que solamente ha mostrado un país de todos los que el estudio expone. Aquí podemos ver otros gráficos de diferentes países que dibujan resultados diferentes:

Por otro lado, como dijimos, el hecho de que alguien herede no significa que mantener el patrimonio no suponga ningún esfuerzo ni ningún mérito. Pero, más allá de este hecho, el error fundamental para mí, esta en el título del estudio: “origen de la riqueza de los multimillonarios”. De nuevo, a no ser que digamos que cuanto más se enriquecen una serie de personas más nos empobrecemos el resto (debate en el que no entraré, pero que es muy discutible), creo que no es adecuado compararse con los multimillonarios. Entre otras razones porque, como decía Jordan Peterson, parece que el principio de Pareto es inevitable:

Si observas el número de personas que producen en un campo determinado, la raíz cuadrada del total de personas genera la mitad de la producción. Eso significad que si tienes 10 empleados, 3 hacen la mitad del trabajo, pero si tienes 10.000 empleados, 100 hacen la mitad del trabajo. Es una estadística bastante cruel. (…) La distribución de Pareto gobierna, por ejemplo, la distribución del dinero. Por lo que el 1% de la población tiene la mayor parte del dinero y el 10% de ese 1% posee casi todo ese dinero. Creo que las 100 personas más ricas del mundo tienen tanto dinero como los 2,5 millones más pobres. Y piensas, bueno, eso es algo terrible, y tal vez lo sea, pero lo que tienes que entender es que esa ley gobierna la distribución de la producción creativa en todos los campos creativos. Es como una ley natural. (…) Imagina lo que pasa cuando juegas al Monopoly (…) ¿Qué sucede cuando juegas? Una persona termina con todo el dinero y luego juegan de nuevo, ¿qué sucede? Una persona termina con todo el dinero. Es, en efecto, la consecuencia inevitable de múltiples intercambios que se llevan a cabo aleatoriamente. Así que si tomas a mil personas y las pones a jugar a un juego de intercambio, digamos que les das 100 dólares a cada uno o 10 dólares, que tienen que intercambiar con otra persona lanzando una moneda al aire, si yo gano me das un dólar, si tú ganas te doy un dólar. Si jugamos por suficiente tiempo, una persona terminará con todo el dinero y el resto terminará con cero. Asi que es una característica intrínseca de los sistema de producción creativa y nadie sabe qué hacer al respecto, porque el peligro es que todos los recursos terminen con una minoría de personas en la cima y una enorme sección de la población termine con cero. Pero culpar de eso a la naturaleza opresiva de algún sistema es subestimar radicalmente la complejidad del problema. Nadie sabe cómo mover recursos desde la minoría que controla casi todo hacia la mayoría que no tiene casi nada, de manera efectiva y consistente, ya que en la medida que bajas el dinero este tiende a volver a subir y eso es un gran problema.

Sea como sea, creo que el resumen que podríamos hacer de todo lo dicho hasta el momento es: ni la meritocracia es tan ideal como nos la pintan algunos, ni es tan falsa como nos la pintan otros. El esfuerzo (en la dirección correcta) siempre da sus frutos aunque nunca lleguemos a la cima, porque en la cima solo caben unos pocos.

menéame