Cospedal: “Que le corten al águila el pico, al gato las uñas, al buey las pezuñas, el rabo al ratón y alégrese el mundo que ha nacido Dios”. Una ‘animalada’ que ha despertado las iras de los animalistas que desde diversas cuentas en redes sociales critican la elección de la popular muy poco tiempo después de haber aprobado una más que polémica Ley de Caza en la región que gobierna. PACMA ya ha tomado cartas en el asunto y no ha perdido tiempo en criticar que “Cospedal no tiene solución, ni en Navidad."
Comentarios
Le faltó añadir el pacto de Dios con Abraham.:
".Circuncidaréis, pues, la carne de vuestro prepucio,y será por señal del pacto entre mí y vosotros.
12 .Y de edad de ocho días será circuncidado todo varón entre vosotros por vuestras generaciones;
el nacido en casa, y el comprado por dinero a cualquier extranjero, que no fuere de tu linaje.
13 .Debe ser circuncidado el nacido en tu casa, y el comprado por tu dinero;
y estará mi pacto en vuestra carne por pacto perpetuo.
14 .Y el varón incircunciso, el que no hubiere circuncidado la carne de su prepucio,
aquella persona será cortada de su pueblo; ha violado mi pacto."
Y así a todos los niños nacidos, les cortareis el prepucio, al igual que el pico al águila, las uñas al gato....
Existe otro villancio, el Canta, ríe, bebe, que aquél que lo conozca, coincidirá conmigo en que parece que lo escribió un asesino psicópata con ganas de ser festivo. Versos como "dale a la zambomba, dale al almirez, y dale a tu suegra en mitá la nuez" o "dale a la zambomba, dale a la sartén, y dale al tendero un tiro en la sien", coronan la dulce cancioncilla navideña. Otro menos expeditivo pero también violento, es Noche Divina, que pide el aguinaldo con los almibarados versos: "dame el aguinaldo carita de rosa, que no tienes cara de ser tan roñosa. La campana gorda de la catedral, que te caiga encima si no me lo das".
En una palabra: hay villancicos inoportunos. Hay villancicos cuya letra uno se toma a broma, porque eso del espíritu navideño se les debió perder bajo la alfombra cuando los escribían, VALE. Pero se supone que tú, si eres un personaje público y sobre todo si eres una persona formada y con un poco de cultura, sabes qué puedes y qué no puedes decir en público, porque alguien se puede ofender... pero como estos políticos nuestros son la extensión del cuñado, de la maruja de la frutería y del tío gordo al que se le abren los botones de la camisa en la zona de la tripa, que te habla con el palillo en la boca y a las mujeres nunca las mira a la cara, pues eso... Que serían capaces de cantar el verso del tiro en la sien al que aludía más arriba, en una reunión de víctimas del terrorismo y cuando alguien proteste, todavía hacerse ellos los ofendidos.
#3 No voy a ser yo quien defienda a ésta tiparraca pero por esa regla de tres, nadie podría contar un puñetero chiste.
Y a los políticos como esta señora¿No hay que cortarles nada?.
Por lo menos coserles la boca.
Está de atar. No hay más.
Nosotros discutiremos este tema esta noche mientras comemos chuleton