Heiko Herrlich, recientemente fichado como entrenador del Augsburgo, no podrá estar en el banquillo de su equipo en el partido a puerta cerrada contra el Wolfsburgo de este sábado. Salió del lugar de concentración de su equipo al supermercado para comprar pasta de dientes, rompiendo así las normas de cuarentena que había impuesto la Bundesliga.
Comentarios
Ha declarado que su expulsión no le ha dejado mal sabor de boca.
Ya me voy.
Lo que demuestra que no hay que ser catedrático para jugar al furgol.
Prefiero autobombos y fake news antes que esta basura de noticia absurda insulsa y vacía de contenido