Hace 6 años | Por efectogamonal a elboletin.com
Publicado hace 6 años por efectogamonal a elboletin.com

Desde la elección de Donald Trump como presidente de EEUU, la gran banca de Wall Street ha estado en casi todas las recomendaciones bursátiles de los analistas como una apuesta segura de revalorización. Sin embargo, los gestores de estas entidades parecen no tenerlas todas consigo.

Comentarios

themarquesito

Las ratas son siempre las primeras en abandonar el barco.

sotillo

#2 Pues ahora que saben por donde salen que pongan unos cuantos cepos

efectogamonal

Preparando otro crack en ...3 ...2 ...1 🔥

N

#5 Si, la verdad es que no es mucho dinero en comparación con el valor de capitalización de estos gigantes (JP Morgan Chase vale unos 200.000 millones de USD…). Lo que da miedo es que sean los que más información manejan, los que vendan sus acciones. Probablemente sea solo una mera operación para ganar más pasta en otros títulos, pero…, y si no? Chan Chan!!, En fin, a los meneantes nos gustan las teorías de conspiración y apocalipsis financieras…

D

Bueno por lo menos ya sabemos cual es realmente el sentido de las empresas en el mundo neoliberal. Ser usadas como cabezas de turco abstractas para unos cuantos hijosdelagranchina que se llevan el dinero de los demás en forma de sueldazos en base a decisiones puramente babuinas y que se coma el marrón el siguiente.

Tras esta reflexión, no sé muy bien distinguir a un CEO del pajarito de Homer.

f

En el "El pequeño libro de la inversión de valor" de Christopher H. Browne, se menciona como síntoma de buena marcha de una empresa la compra de acciones por parte de los de dentro. En cambio la venta de acciones no significa nada, porque puede ser tanto por problemas en la empresa como simplemente necesidades de liquidez personales.

Aunque parezca preocupante, es fácil que no signifique nada, pero siempre nos quedará la duda.

D

¿Cuánto será en USD esos 9 millones de acciones? porque lo mismo es una ridiculez

D

#4 me autocontesto: Morgan Chase a 93 USD. Lo dicho, es una ridiculez anecdótica en término de las gigantescas sumas que mueven.