En la sentencia, que es firme tras un acuerdo entre la defensa y la Fiscalía de delitos de Odio, el juzgado de lo penal 11 de Barcelona impone también al acusado, que en el juicio pidió perdón a la víctima, una multa de 150 euros y le impide acercarse a menos de un kilómetro y comunicarse con el sintecho, al que deberá indemnizar con mil euros por las lesiones y el daño moral que le causó.
Comentarios
Una especie de strike blando
Ahora que sabe donde vive, que se ponga enfrente de su portal, lo mismo le da.......y el hijo puta que se large a un km.
Así aprenderá que la vida de los sintecho es muy dura. Buen castigo