La exministra de Asuntos Exteriores, Arantxa González Laya, sigue trazando su nuevo rumbo laboral. Así, siete meses después de ser cesada por Pedro Sánchez, ha alcanzado un acuerdo con la multinancional de productos lácteos, Danone, para convertirse en aseora externa y ayudar a alcanzar los objetivos que se ha marcado la empresa. El departamento de María Jesús Montero autorizó a la predecesora de Albares a ser contratada por la multinacional francesa. Otros altos cargos también han hecho el trasvase al sector privado estas semanas.
Comentarios
En recompensa por las leyes a favor de los yogures que desarrolló desde el ministerio de exteriores.
#3 #5 Efectivamente. Parece más un caso de noticia sensacionalista (incluso errónea) que intenta pasar por puerta giratoria como algo que no es. De hecho ni se cortan, y lo ponen en los dos pies de foto.
Creo que en La información no tiene muy claro el concepto de puerta giratoria y que, para que efectivamente sea una puerta giratoria, debe obtener beneficio de su anterior ocupación pública, produciendo conflictos de interés entre la esfera pública y la privada, en beneficio propio y en perjuicio del interés público.
#7 Todos sabemos que dependiendo del partido contarían como puerta giratoria hasta que entrara de charcutera en el supermercado del barrio regentado por indios.
Lo bueno de esta gente que tenemos en España, es que lo mismo te plancha un huevo que te fríe una camisa
#1 Haber estudiado
#1 Currículum tiene. De hecho no parece un puesto de más envergadura que los que asumió antes de su paso por el gobierno, ni parece que las responsabilidades asumidas en dicho gobierno le permitieran realizar un trato de favor por el que ahora le puedas estar pagando.
#5 contactos también. Y enchufados a su cargo probablemente
No es que sean puertas giratorias, es que es política de puertas abiertas.
Es la prueba fehaciente de por que miman tanto a las empresas grandes.
Puertas giratorias
Gracias por tanto, senora Laya.
Cómo se echa de menos su gran gestión
Creo que ella y Antonio tienen la proa puesta a la trena, por lo que ha dicho el juez sobre el caso Gali, que no quiere que se coma el marrón ella sola