Gervasio Deferr fue un ídolo del deporte olímpico español durante algo más de una década. Oro en Sydney 2000 y Atenas 2004 en salto de potro y plata en suelo en Pekín 2008, el gimnasta estuvo en lo más alto... y acabó cayendo. Él mismo ha confesado cómo las adicciones, al alcohol especialmente, le hicieron tocar fondo. Jordi Évole le fue a visitar a su gimnasio en el barrio de La Mina en Barcelona, donde se crió. Ahí trabaja con niños y niñas que quieren emularle.
Comentarios
Una persona que se abre en canal en el programa. Sincero, descarnado y honesto. Un buen programa para ver el infierno que llevar llegar al cielo.
No se crió en la mina. Era de Premià y en seguida se fue al CAR de Sant Cugat.
Ahí trabaja con niños y niñas que quieren emularle.
Espero que sea en lo "bueno".
#1 .... me temo que no viste el programa, porque de haber sido así, hubieras pillado el sentido de esa frase