Hace 8 años | Por SRAD a publico.es
Publicado hace 8 años por SRAD a publico.es

Los riesgos ambientales del proyecto, impulsado por la empresa líder del sector porcino en Aragón junto con un gigante chino de la energía, provoca el rechazo social e impulsa una campaña de oposición que lleva recogidas 8.000 firmas mientras IU y Podemos llevan la polémica a las Cortes de Aragón. La declaración de impacto ambiental del proyecto admite que la afección de la emisión de partículas y de gases como dióxido de azufre, óxido de nitrógeno y monóxido de carbono será “severa”. Prevén quemar 408.000 toneladas de chopo, eucalipto y caña.

Comentarios

ipanies

“Este tipo de industrias pesadas no podían ponerse a menos de 2.000 metros del núcleo urbano con la normativa del año 1969, y hoy se ha dejado poner a 600, lo que es una temeridad”, señala Miguel Aso, coordinador de IU en Huesca y concejal de Cambiar Monzón.

Todo pelotazos, en funciones, claro

Rorschach_

Pues sí, señor de los corchos, la cagada a la hora de facilitar la autorización es sensacional...
'un proceso de revisión de oficio de la autorización: se ha percatado de que al conceder el permiso no había tenido en cuenta algunos contaminantes propios de la combustión de la madera'

D

#1 No se le ocurrió pensar que al quemar madera sale humo. Es un error que nos puede pasar a todos

Rorschach_

#2 Y los chinos ya ni te cuento...

#3 Creo que algo le ha tenido que afectar, pero no mencionan alcornoques

tul

seguro que los dueños de la empresa lider del sector porcino viven bien lejos de la planta esa

D

Independientemente de que este proyecto individual esté bien o mal hecho, y la autorización esté bien o mal hecha, ¿Cuando decimos que defendemos la biomasa como energía renovable, de qué pensamos que estamos hablando?

SRAD

#5 Hay formas y formas. No es lo mismo, por ejemplo, emplear RSA (resíduos sólidos agrícolas) como combustible (por ejemplo, hollejo, cáscara de almendra...) que ocupar tierras agrícolas y forestales plantando chopos o, lo que es mucho peor, eucaliptos (alóctonos).

En cualquier caso, la biomasa debería devolverse a la tierra para ser incorporada como nutrientes. Quemándola, empobrecemos los suelos y devolvemos a la atmósfera el CO2 que previamente esas plantas capturaron.