Ese es el caso de Jennifer, una joven que tras ver a varios de los 'influencers' que seguía recomendar esta tienda decidió comprar allí un iPhone XS Max de 256 GB. Lo hizo el 28 de junio y se dejó 424 euros (el precio de este móvil en el mercado es de 1.329 euros), pero pronto se dio cuenta de que el negocio olía muy mal. "Empezaron a hacer cosas raras, se contradecían, empezaron a comprar seguidores en sus redes y me di cuenta de que me estaban timando".
Comentarios
La peña no aprende.
¡Que no te van a dar duros por pesetas! Decian en tiempos de mi padre.
Si no son capaces de ver que eso olía mal desde el comienzo, que nadie da duros a pesetas ( #1 )...
Le auguro un futuro complicado a esta Jennifer.
Pd: me importa un pimiento que sus youtubers lo anunciasen, peor aún, si es tan ciega de hacer caso a todo lo que ellos digan peor aún.
#4 Qué se ha gastado, trescientos euros esperando que le dieran un iphone nuevo, pues le ha salido barata la lección. Una pequeña estafa a tiempo que es como una vacuna, ahora ya ha generado anticuerpos y no se fiará ni de su padre.
A ver, comprar una de las últimas unidades de un modelo descatalogado de algo procedente de exposición puede conllevar un jugoso descuento, peeeero, nadie hace un jugoso descuento de un artículo tecnológico recién salido y de valor estable.
"Influencers" de palo seducidos por ofertas de publicidad para negocios fraudulentos, que no tienen ningún remordimiento en convertirse en partícipes de la estafa.
Podríamos estar hablando de personas semi anónimas en internet, o podríamos estar hablando de gente como Carlos Sobera.
Otros que no superaron ni las matemáticas de EGB. Señores periodistas, gasten un par de horas en hacer unos pocos ejercicios de porcentajes...
Negocios Pirámidales en la era influencer...