Meterse en broncas y recriminar a los subordinados con malos modales no es suficiente para justificar el despido de un jefe. No, al menos, si la empresa es permisiva y acaba por expulsar al gerente meses después de ocurrir los hechos. Así lo ha dictado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid en una sentencia, donde confirma la improcedencia del cese del responsable de área de una compañía porque la sanción llegó fuera del plazo que marca la ley. Según el fallo, el operario ocupaba un puesto de jefe de departamento.
Comentarios
Le puede despedir cuando quieran: improcedente, indemnización y hasta nunca.
Intentar que los despidos sean prácticamente gratuitos es un vicio de las empresas que se permitió con la eliminación de los salarios de tramitación.
Despido improcedente no es librarse del despido. Sensacionalista.