Hace 1 año | Por --652052-- a lavozdeasturias.es
Publicado hace 1 año por --652052-- a lavozdeasturias.es

Los propietarios asiáticos están en un proceso de reconversión de la compañía que incluye un expediente de movilidad geográfica. El expediente ha supuesto que hoy cierre la fábrica de Albo en Celeiro, en Lugo, cuyo negocio de conservas de pescado se remontaba a mediados del siglo XVIII. En la actualidad contaba con 45 trabajadores -34 mujeres y 11 hombres. Los dueños chinos trasladarán la producción de túnidos a la planta de Plisán, en Pontevedra.

Comentarios

Cantro

Para el que no lo sepa, "Plisán" no es un lugar, es el acrónimo de un polígono industrial pegado a la frontera portuguesa

D

Bueno, el que tenia que recoger pasta, ya la recogió. Y los pringaos, pringaos son.

D

Ha venido a tomar la tecnología, la distrubuución y cerrar una fábrica de la competencia.
Esta es la "buena gestión" de nuestros políticos, la Xunta en este caso, vender nuestras empresas a los intereses extranjeros para que cada día seamos más pobres sin remedio.

DrV

Dentro de poco no se verá esa marca en los mercados españoles, toda la producción irá a China.