Hace 11 meses | Por ClaraBernardo a elpais.com
Publicado hace 11 meses por ClaraBernardo a elpais.com

Las redes sociales han universalizado la antigua grosería de la barra de bar y el muro del retrete. La rima cruel, la gracia, la consigna, ahora la repiten en público personas que ocupan cargos públicos y que están seguras de poseer una educación exquisita

Comentarios

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"Las mentiras no pierden su veneno al volverse habituales, pero cada vez provocan menos escándalo", dice Antonio Muñoz Molina.

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#1 cambios de opinión, no me seas antiguo

KevinCarter

Nada que no advirtiera en su momento el gigantesco Umberto Eco. Pero en este mismo foro, Menéame, miles de gilipollas negando lo que decía un Maradona de la filosofía. Pues os vais a comer una mierda tan gigantesca gracias a todo esto que es una pena que Eco ya no esté entre nosotros (icluso los que negaban que Eco tuviera razón en su denuncia de cómo las redes sociales ayudan a esparcer el gilipollismo y la falsedad de forma muy peligrosa).

ChemicalX

100% de acuerdo. Y sobre todo con lo de "el embustero sabe que a partir de cierto grado la mentira tiene un efecto paralizador".