Hace 2 años | Por MiguelDeUnamano a eldiario.es
Publicado hace 2 años por MiguelDeUnamano a eldiario.es

Todo está permitido contra el otro: el disidente. Se pueden violar su intimidad, sus derechos, su libertad, se les puede perseguir y acosar, no solo porque el aparato político, judicial y policial lo legitima sino porque también lo bendice buena parte de la sociedad. De ahí que el espionaje a catalanes y vascos no haya provocado ni la mitad de indignación que hubiera provocado el espionaje al resto de españoles. Porque la cloaca podemos ser todos. El Gran Hermano empieza en cada uno de nosotros.

Comentarios

baraja

Qué cansina que es la gente que da por cierto un relato propagandístico sin pruebas ni denuncias

Periodismo del siglo XXI, viene un fulano con su historia y la publicas avalada por su palabra con un conflicto de intereses del tamaño de un elefante.

D

Una cosa es ser disidente y otra cosa distinta es saltarse la ley

MiguelDeUnamano

#2 Ya he puesto otras veces el ejemplo: cuando se espió al presidente de la Generalitat durante las negociaciones de ERC con el PSOE para la investidura de Sánchez, ¿qué ley se había saltado o iba a saltarse Pere Aragonès?

D

Bloquear frontera.
Bloquear aeropuerto
Disturbios interminables en Barcelona
Atacar un helicóptero volando.

Hechos a ocurrieron de verdad.

Lo volveremos a hacer...

D

En un país donde denunciar la corrupción es buscarte la ruina...

f

Casi totalmente con el artículo,excepto que me malicio que las cloacas no se han trasladado de Interior a Defensa.Me temo que las dos trabajan a pleno rendimiento.