Corre el escalafón en la Iglesia. Al menos en Madrid. El cardenal Carlos Osoro, de 78 años, cuelga el báculo pastoral y se retira de la actividad eclesiástica, abriendo un nuevo camino en la archidiócesis regional. Desde El Vaticano ya han decidido quién será su sustituto. El Papa Francisco ha confiado la tarea de sustituirlo al que hasta entonces era uno de los prelados auxiliares. Se trata de José Cobo Cano, un hombre de corte progresista, conocido por una visión más aperturista de lo común entre la jerarquía. No obstante, ante los micrófonos
Comentarios
¿Y este era el superprogresista que el papa Francisco había nombrado?
#3 Es que Iglesia y progresismo no puede ser. Es como Biblia y ciencia o mil comparaciones mas.
#4 Efectivamente, Yavhé a los homosexuales los mataba, y eso está en las sagradas escrituras así que mal apaño tiene ya. Si eres gay mejor búscate otra religión
#3 como el gran progresista gallardón del PP.
#3 Está hablando del matrimonio eclesiástico, no del civil, la comparación es pertinente. Son las normas de su club. Nunca he entendido a los homosexuales que quieren que la iglesia católica les case o cosas por el estilo. Si tu forma de vida no comparte lo mismo que tu fe lo lógico es abandonar tu fe o cambiar tu forma de vida, cosa esta última nada recomendable porque como dijera cierto sabio: "Entre la fe y el pimiento escojo el pimiento, la fe no se puede freír".
Me hace gracia cómo se justifica todo en tradiciones: "El sacramento tiene unas pautas y la relación entre dos personas tiene otras pautas."
Pero si todo en el cristianismo son inventos. A cada pocos siglos se van inventando unas tradiciones u otras, según les conviene. Cuando el cristianismo esté en las últimas se inventarán que el Espíritu Santo les ha revelado que Dios quiere que el matrimonio incluya también a homosexuales y que el sacerdocio también acepta a mujeres y a personas casadas.
Bueno, de cara a los feligreses tampoco habría mucha diferencia: el único que bebe durante la eucaristía es el cura...
#5 oye, pués ni tan mal. Si Jesús puede trans mutar el vino en su sangre durante la eucaristía, no creo que sea un problema irresoluble transmutar una kocacola con azúcar en sangre diabética, así que mejor que se kocacola Zero.
#14 Una verdad superior y más nutritiva.
Ja, ja, ja. Pero que gente más rancia, seguro que usa la versión rancia de MNM.
Se quieren pasar al calimotxo... ¡les hemos pillao!
Irrelevante. A ver si empezamos a darle la importancia que se merecen.
Interesante, aparte de que Jesucristo no habría tenido problema en transformar su propia sangre en cocacola si le hubiese sabido del nabo. Pero lo importante es: ¿qué comparación se guarda Monseñor para la pederastia, que es como una eucaristía con pan sin gluten? Espero su respuesta. Sentado, claro.
Pues entre ofrecer el cuerpo y la sangre de Cristo o la coca y la cola igual recuperarían parte del mercado que están perdiendo en su negocio tradicional.
#11 Si el vino de la eucaristía no lo bebiera solo el cura también recuperarían algo de negocio, por un chupitín ya veo a unos cuantos comulgando.
#12 pues sí, sólo remojan la galleta, son teófagos adoradores de la miseria. Un nutritivo plato de espaguetti encierra claramente una verdad superior.
No estoy nada de acuerdo (en general) con los posicionamientos de la iglesia.
Dicho esto, he oido la entrevista y lo que ha dicho es que el matrimonio, tal y como lo concibe la iglesia, solo se aplica con un tipo y una tipa. Hasta ahi, de acuerdo, su secta, sus reglas. Ha patinado (creo) cuando le ha pregutnado si celebraría una eucaristía para "celebarar el amor entre dos personas del mismo sexo". Ahi es donde (creo) que ha perdido una buena oportunidad para decir "si, pero sin llamarlo matrimonio" y se ha liado con la tontería de la cocacola
Es libre de hacer la eucaristía con lo que quiera, como si quiere tomarse un cubata, total se lo va a beber él...
El matrimonio no es una cosa exclusiva de la religión, así que éste señor puede decir las burradas que le de la gana que no tiene autoridad alguna sobre ello. De hecho, un matrimonio por la Iglesia debe ser tramitado por la misma con el Estado que es quien sí tiene autoridad real.