Hace 9 años | Por bandurrias a blogs.publico.es
Publicado hace 9 años por bandurrias a blogs.publico.es

Hay muchas y variadas razones para pitar el himno nacional, y la primera y principal es que es feo de cojones. ¿No había nada mejor que el chunta chunta en una tradición musical que ha dado a Falla, a Albéniz y a Tomás Luis de Victoria? Por eso se lo censura igual que a una soprano cuando desafina o que a un torero cuando descarrila. La segunda razón es que ni siquiera es un himno, sino una marcha, real y granadera para más señas, cuando algunos (algunos millones) estamos de realeza hasta la coronilla. La tercera es que ni siquiera tiene letra,

Comentarios

v

Fuera coñas, el artículo tampoco me ha gustado mucho, pero creo que hace buen incapié en un par de asuntillos:

El pitar ya por costumbre y por que es lo que se espera de catalanes y vascos en la final de la copa del rey,

Y la mierda de tener que comernos un himno que suena a rancio y a época militar y monárquica.

Creo que es un bueno momento para poner estas cosas en entredicho. Dialogar es avanzar, y criticar también, qué cojones!

e

Repitan conmigo: Libertad de expresión.

v

#1 LIBERTAD DE EXPRESIÓN, COJONES!

Siento las mayúsculas, pero me he venido arriba.

D

#1 Pues en Francia se retrasa o suspende el partido. Ni que decir la que se puede liar en EEUU...

e

#5 Y en Arabia Saudi te pueden decapitar ¿y?

x

#1 Libertad de expresión total entonces. Todo lo que no sea violencia física, claro. Empecemos por no cerrar campos por racismo. No?

e

#9 El club al que pertenece el campo puede tomar sus medidas, pero no una institución pública que venga a decir lo que hay que hacer.

jamaicano

Esto es como españoles por el mundo, periodistas que cuando van a al extranjero y ven a todo el mundo comportarse de forma cívica... te alaban los comportamientos de dichas gentes.

Basileos

¿El pitar al speaker en castellano en el Camp Nou fue libertad de expresión?

http://www.marca.com/2015/05/30/futbol/copa_rey/1433016576.html

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Más gilipolleces de la progresía. Lo que hay que aguantar