"¡Muchachos, tenemos que dispersarnos!". Junior, un marfileño de 20 años, se levanta y rompe el silencio que reina en el tren que une las ciudades fronterizas de Irún, en España, y Hendaya, en Francia. En el andén de la estación de Hendaya, patrullan policías franceses. Del grupo de seis migrantes llegados de Costa de Marfil, Mali o Guinea con la idea de ir a Francia, sólo Junior se atreve a bajar del tren. "No tiene visa, no es posible", le dice uno de los agentes examinando su pasaporte. Aprovechando que éstos les dan la espalda, los otros…
Comentarios
Hombre, si prometen que se quedan en Francia Abascal les fleta unos cuantos buses ipso facto.
ipso facto
Expresión latina que significa ‘inmediatamente’, ‘en el acto’.
Es que el objetivo siempre fue salir de África
A esta gente no le quiere nadie, pero les dejamos pasar para que vayan a Francia, hay dos caminos, abrir las fronteras o cerrar las fronteras, bueno hay otro camino el de la hipocresía que es en el que nos movemos, tenemos que cambiar nuestras leyes, si tenemos fronteras hay que poner medios para que lo sean. Vamos a un mundo en el que vamos a estar divididos y manipulados por los mismos que nos quieren imponer las migraciones y llaman racistas a los que reclamamos que se ponga orden. Nadie quiere a esta gente, es un arma de guerra, hay que ser solidario pero está claro que solo interesa una solidaridad, el enseñar a pescar ya no se contempla.