A los 38 años, Àngela Graupera dejó la tranquilidad de su casa para irse a la guerra, pero no para matar, sino a curar. Se fue a Serbia para ser enfermera en la I Guerra Mundial. Lo que vio la dejó consternada, de tal manera que además de atender heridos en un hospital, se convirtió en la reportera del diario barcelonés Las Noticias Escribió: “El infierno descrito por Dante es glorioso paraíso comparado con este alucinante antro de pobres condenados a todos y los más atroces suplicios”.
Comentarios
Es ahí donde miles de machistas se mataban y se mutilaban entre ellos para que sus mujeres, sus hijos y sus bienes estuviesen a salvo verdad? Vaya unos opresores y vaya unos privilegios machistas
Que de recuerdos a Mambrú.
Qué dolor, qué pena...