Hace 2 años | Por Pilar_F.C. a elpais.com
Publicado hace 2 años por Pilar_F.C. a elpais.com

Los socios de la Biblioteca Pública de Nueva York pueden descargar, a golpe de clic, cientos de miles de títulos, desde obras infantiles al último ensayo sobre Ucrania. Sin moverse de casa, gratis y en cuestión de segundos. O acercarse si prefieren a cualquiera de los cientos de sucursales que la institución tiene repartidas por todos los barrios de la ciudad. Ahora, además, a modo de santuario temporal de la libertad de expresión, la institución ofrecerá al público en general una lista de libros prohibidos o perseguidos en varios Estados ...

Comentarios

Jakeukalane

Pues bien por ellos. Nosotros no podemos. Espero que alguien los suba a scihub o libgen. .

editado:
Error.
Gracias a un nuevo programa anunciado esta semana, cualquier persona, no solo los titulares de la tarjeta de la Biblioteca Pública de Nueva York ...

zentropia

#7 lo cual es muy imbécil. Si.

zentropia

#9 hay libros mucho peores y más peligrosos. Alguno que te explique como fabricar una bomba sucia, por ejemplo.
Dejamos circular libremente la propaganda de ISIS? Esa que dice que un buen musulmán ha de ir a los parvularios a matar niños crisitianos?

Sorry. No creo en la libertad absoluta porque lleva a un mundo con menos libertad.

F

#10 esos libros tampoco han de ser prohibidos.

F

Prohibir un libro wall ¿Puede haber algo más gilipollas?

Cuchipanda

#2 ¿prohibir una planta?

D

#2 ¿Poner una multa por escribir un poema?

D

#2 prohibir una práctica sexual consentida?

(En el país de las libertades, dicen muy orgullosos)

https://www.elmundo.es/f5/2016/02/10/56bb564746163f912e8b45fe.html

zentropia

#2 Hay un montón de libros nazis prohibidos... Hasta han cerrado librerías aquí en España.

https://es.wikipedia.org/wiki/Librer%C3%ADa_Europa

Feindesland

#6 Y falta un telediario para que prohíban a Tolstoi...

F

#6 me da igual, ningún libro ha de ser quemado o prohibido. Me da igual si es el Mein kampf, El Capital o El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado.