Antonio Medina Vega, quien desfiló por las calles de París junto a los republicanos españoles como héroe de la resistencia, fue fusilado por los franquistas en Madrid en 1946. De Gaulle, que le había agradecido expresamente sus éxitos contra los nazis, exigió a Franco la conmutación de la pena y, tras el fusilamiento cerró la frontera con España. No ganó el Nobel de la Paz, ni le dedicaron una calle o una plaza en su tierra natal, pero nadie lo mereció más que él.
Comentarios
Esperaba la historia de un ave excepcional...
#1 el canario que salvó a centenares de mineros...
Honrado por tener un compatriota así.
#2 Yo también me siento orgulloso tener a ese compatriota
en cada comarca suele haber uno,
sumando todos los que fueron salvando igual nos vamos por encima de la población actual.
es guasa por aburrimiento señor juez y agentes del morral.
Joer con el pajarito, y luego otros tienen a los canarios enjaulados para que canten...