Incontables estanques, pozos y fuentes públicas son testigos de que las monedas no flotan, sino que se hunden hasta el fondo. Esta norma general tiene, sin embargo, algunas excepciones. Todo depende del metal del que esté hecha la moneda y de cómo la echemos al agua. El truco consiste en depositarlas sobre la superficie con sumo cuidado valiéndonos de un clip doblado en L.
Comentarios
más información sobre la tensión superficial https://es.wikipedia.org/wiki/Tensi%C3%B3n_superficial
Pues del mismo modo que se puede llenar un vaso por encima del borde.
#1.
Metiéndolas en el bolsillo del barbudo.
Flota por efecto de la inflacción
¿Por qué alguien querría hacer flotar una moneda?
#4 para salvar a la banca pedazo de rojo