Vivimos una época rarísima, una época en la que podemos ver decapitaciones en línea pero no podemos ver un pezón en Facebook, es ridículo. Un mundo en el que se censuran fotos de madres amamantando a sus hijos pero podemos ver un vídeo donde un narco le corta la cabeza a otro. La violencia nos rodea y estamos habituados a ella. Llevo tres novelas en una década y creo que me he propuesto volver terrorífica la violencia, presentarla como el horror que es.
Comentarios
Entiendo lo que quiere decir (y lo comparto, porque es ridículo).
Pero una decapitación tampoco se puede ver en Facebook, y un pezón -y el resto- se puede ver en pornhub, xhamster, porntube, fuq, ....
O eso me han dicho.
#1 Los pezones se tienen que ver como cotidianos hasta que dejes de verlos, cosa que dudo
#1 Yo he visto en Instagram ejecuciones del ejército turco a civiles en Siria y a Instagram no le pareció lo suficientemente fuerte para eliminar el vídeo, pero por subir una foto de Erdogan en la que ponía "Turkill" me cerraron la cuenta.
#6 en caralibro, hará 2 o 3 semanas, retransmitieron el vídeo de cómo unas taradas americanas, mataban a una chica que salía de un súper.
En la empresa del caralibro, puedes publicar una matanza y, no te la borraran si la ha visto poca gente, eso sí, enseña un pezón femenino y te suspenden la cuenta en cuanto subas la imagen (imagen que pasa a ser de ellos con dicen en su contrato).
Mentalidad americana
Así es corazón, vivimos en una novela de Franz Kafka.
Es como decir en España se vende droga pero si sales en pelotas a la calle te multan
Es una verguenza que esta gente que encima que vende nuestros datos, nos censuren en nuestros país con sus leyes carcas y su policorrectismo, hay que plantarles cara, está claro que al final las redes son casi necesidad, pero deberían de ser nacionales y con nuestra legislación.
Lo mejor es olvidarse de Facebook y ya está
El asunto sí es ridículo y desproporcionado, lo que tampoco deja de lado algo tan cierto como que las tetas y pezones hacen parte del diformismo sexual. Y sí nos ponemos con tales, pues que el quiera muestre su pito en carelibro