Sus acciones no se limitaron a la legislación, para promover el ataque hacia las creencias, durante una exposición de ganado se llamó “Dios” a un toro, “Cristo” a un burro, “Virgen de Guadalupe” a una vaca, “El Papa” a un buey y “El Arzobispo” a un puerco. El mismo Garrido se sumó a la burla al nombrar a uno de sus hijos Lenin y a una hija Zoila Libertad, aspecto que dio origen al dicho que aseguraba que la única libertad que existía en Tabasco era la de Garrido. Nombres que quedaban cortos cuando lo acompañaba su sobrino llamado Luzbel.
Comentarios
El más disgustado de todos debe ser el puerco. ¡Mira que llamarlo de esa manera tan irrespetuosa!.
Alumno de Fernández Diaz
Los sectores más bastos de la plebe solo reciben el mensaje de esta forma.
Lunatcharsky sometió a dios a juicio y lo condenó a muerte por fusilamiento.
Me parece bien.
Es lo que tienen las supersticiones ... tanto de uno como del otro lado.