La investigación confirma que los molares, incluidas las muelas del juicio, proporcionan información que hace que se pueda predecir el tamaño de dichos dientes por la denominada 'cascada inhibitoria' –una regla que muestra cómo el tamaño de un diente afecta a las dimensiones del que le sigue–. Esto es importante porque indica que la evolución de estas piezas en la especie humana ha sido mucho más simple de lo que los científicos habían pensado previamente.
Comentarios
Entonces si me cago en tus muelas me estoy cagando sobre toda la humanidad...
#3 O en tus antepasados.
O sea que: me cago en tus muelas = me cago en tus muertos.
Pues yo he perdido parte de mi historia
#1 ¿Tu solo?
La sacas y cuentas los anillos...
juicio es que les falta a a los del Psoe