A principios de los años ochenta, el padre de Alfonso Aguado decidió hablar seriamente con su hijo. El chaval acababa de terminar la carrera de Derecho y el progenitor quería saber hacia dónde pensaba orientar su carrera profesional. ¿Tenía intención de ejercer como abogado? ¿Prefería hacer oposiciones? “Le dije: ‘Mira, papá, he escrito una canción que se llama Manué no te arrime a la paré que está funcionando bastante bien y quiero dedicarme a la música’.
Comentarios
No entiendo la dicotomía entre sentirse comprometido con algo y haber tocado en Los Inhumanos.
Por cierto, fue mi primer concierto en mi vida. En el Parque de Atracciones de Madrid. Debía de ser el año 1991 más o menos. Me lo pasé muy bien. Eran cuarenta y la madre.
#1 Porque hay gente a la que le mola el postureo de la pureza, del nivel "me lo he leído en vinilo antes de que saliera en libro", y si no has sido siempre un serio amargado, entonces pierdes puntos de pureza
#3 ¿Algo así como los puretas que se chinan cuando ven a algún crio con una camiseta de los Ramones del Zara?
#1 Ahora no cuentan porque tocar en semejante engendro no hace buen currículo, sino lo contrario.
#4 Porque ahora les duele la cara de ser tan guapos y mean colonia.
#4 eso me cuadra más que lo de estar comprometidos. De todos modos, la música es como las lenguas. Puedes decir que has hecho tal o cual, pero si te dicen "toca" o "habla" en seguida demuestras lo que sabes o lo que no.
“Una de mis películas favoritas es El guateque, en la que hay una fiesta de la espuma con un elefante y siempre quise hacer una cosa parecida. Buscamos un domador ruso que aceptó llevar tres elefantes, aunque nos decía que él no se responsabilizaba de lo que pudieran hacer los animales. Lo de la cárcel fue porque, desde que era pequeño, nuestro mánager tenía la fantasía sexual de entrar en una prisión solo para mujeres. Por eso, me confesó posteriormente, nos organizó esa actuación benéfica”.
¡Cómo estaban las cabezas en aquella época!
Mi grupo y yo una vez fuimos sus teloneros y bien orgullosos que estamos. No voy a entrar en detalles, pero su backstage era de los más divertidos en los que he estado
Yo los vi en la expo, el rato que aguanté. Malos y con
pocaninguna gracia no, lo siguiente. Un montón de mongolos haciendo el cabestro encima de un escenario. Porque en Guantanamo no los conocerán, sino se lo ponen a toda leche a los de alqaeda para torturarlos.