Era un personaje singular, que sentía una gran predilección por los mariscos, un producto caro, pero que en paralelo era amante de los vinos sencillos, a granel, como testimonian las fotografías de Picasso a la mesa. Precisamente la lista de la compra de Pablo Picasso durante su estancia de seis meses en la Barcelona de 1917 es la que ha permitido reconstruir los gustos del genial pintor malagueño, gran amante de Cataluña, a la que regresó desde París en plena primera guerra mundial cuando ya era un artista de gran reconocimiento.
Comentarios
El último párrafo apesta a clasismo que tira de espaldas.
#2 Totalmente de acuerdo.
Ahora, a Picasso le hubieran machacado en las redes.
http://www.elcomercio.com/tendencias/pablopicasso-genio-maltrataba-mujeres-violencia.html
#3 Es lo que tiene cuando se comparan las cosas de diferentes épocas.... por cierto entonces es muy probable que la mayoría de los hombres medidos con éstos parámetros, hubiera qué haberlos encarcelado... y tanto hombres como mujeres creyeran que eso era amor.... lo curioso es que hoy siga habiendo TANTOS HOMBRES que lo sigan creyendo y actúen de igual forma.
Gracias por compartir esta nota! - Excelente