El característico color rojo con el que identificamos las manzanas en nuestro imaginario está desapareciendo como consecuencia del calentamiento global y el consiguiente aumento de las temperaturas. Sin embargo, tras 15 años de investigaciones y ensayos, la genética ha conseguido crear manzanas capaces de sobrevivir a olas de calor con un sabor y un color intacto. Este particular avance garantizará que durante las próximas décadas las fruterías sigan ofreciendo variedades como Red Delicious, Gala o Fuji.
Comentarios
El titular contradice a la entradilla.
Para mi lo característico es que sean verdes.
Estos lo que quieren es un impuesto para la prevención del calentamiento global