Un equipo internacional de matemáticos y físicos, dirigidos por Éanna Flanagan, de la Universidad de Cornell, en Nueva York, acaba de anunciar que, a medida que se desplazan por el Universo, las ondas gravitacionales alteran de forma permanente las propiedades de las partículas que quedan en su estela. O, dicho de otra forma, provocan alteraciones, o “arrugas”, en el mismísimo tejido espacio temporal a medida que lo atraviesan.
Comentarios
Aprovechemos el agujero de gusano spock!
Vamos, que los agujeros negros están dejando el universo hecho unos zorros.
#1
Pero son casi imperceptibles ... ni botox hace falta para quitarlas.
No tenemos ni idea de lo que hay ahí fuera.