El emperador Napoleón Bonaparte consideraba al papado como “uno de los mejores oficios del mundo” y Adolf Hitler “uno de los más peligrosos y delicados de la política mundial”. Napoleón estimaba la fuerza de un solo Papa con la fuerza de un regimiento de doscientos mil hombres. Mientras los papas bendecían a sus fieles por un lado, recibían a embajadores y a jefes de Estado de otros países, enviaban nuncios y legados en misiones especiales, por el otro. Mas Info: http://www.revistafusion.com/2005/agosto/entrev143-2.htm
Comentarios
Este con el Nick ya paga.
"Napoleón estimaba la fuerza de un solo Papa con la fuerza de un regimiento de doscientos mil hombres."
Para que inventaron eso de la confesión? Pues todos y tadas pillados por los testículos y o varios.