Así era el arriesgado oficio de percebeiro hace 70 años. Fotos de Milucho Mariñas donde se muestran las magníficas piñas de percebes y como estas personas se jugaban la vida sostenidos por una cuerda para conseguir el mejor percebe del mundo.
Los percebes y berberechos no saben a nada. La gente que le gusta esos bichos en realidad lo que le agrada es el condimento que le echan a esos mariscos. Por ejemplo, cierras los ojos, te zampas unos mejillones en escabeche y luego unas patatas fritas en escabeche y saben igual, o sea, a escabeche y las patatas por lo menos no tienen las tripas llenas de mierda de los mejillones.
#4 a los percebes no se les echa ningún condimento. Se cuecen con sal y ya. Estoy de acuerdo en que saben a poca cosa. Pero poderlos comer refleja tu poder adquisitivo.
Huevos como melones los de esta gente.
Conozco la costa gallega y es jugarse la vida cada vez que bajaban.
Y sin poder permitirse ni el más mínimo error, y aún a veces ni con esa el mar te respeta.
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Los percebes y berberechos no saben a nada. La gente que le gusta esos bichos en realidad lo que le agrada es el condimento que le echan a esos mariscos. Por ejemplo, cierras los ojos, te zampas unos mejillones en escabeche y luego unas patatas fritas en escabeche y saben igual, o sea, a escabeche y las patatas por lo menos no tienen las tripas llenas de mierda de los mejillones.
#4 a los percebes no se les echa ningún condimento. Se cuecen con sal y ya. Estoy de acuerdo en que saben a poca cosa. Pero poderlos comer refleja tu poder adquisitivo.
Huevos como melones los de esta gente.
Conozco la costa gallega y es jugarse la vida cada vez que bajaban.
Y sin poder permitirse ni el más mínimo error, y aún a veces ni con esa el mar te respeta.
A ver, esto es como todo, de arriesga por la recompensa
En esa época encontraban percebes y berberechos a granel. Había una barbaridad