Una de nuestras características humanas es la capacidad para la crueldad, hacia nuestra propia especie y hacia todo lo demás. Desde el neolítico, al menos 5.000 años antes de Cristo, entre las incipientes sociedades agrícolas del “creciente fértil” fue costumbre castrar a los animales, una vez que se descubrió que este procedimiento reducía su bravura y controlaba su reproducción. Como eran tan ingeniosos, a alguno se le ocurrió que lo mismo podría pasar con los esclavos: disminuirles el impulso sexual y suavizar el carácter.
Comentarios
Yo se lo ponia a mis hijos cuando eran bebés para que olieran bien.
No apto para lectores sensibles
Caballeros blancos siempre ha habido
Aviso para censores: El siguiente comentario es pura ficción, y las personas a las que se refiere son hombres blancos heterosexuales, con lo cual no son susceptibles de ser víctimas de discurso de odio.
Claro que hay eunucos, pero ahora se les llama "aliades" y a pesar de que su principal objetivo en la vida es follar, y para lograrlo son capaces de llegar a las más altas cotas de autohumillación, han sido totalmente emasculados y se conforman con que les den una palmadita de aprobación en la cabeza, entre insulto y escupitajo.
#3 madre mia los complejos que debes tener.
#5 #6 A este su madre solo lo quería como amigo...
#3 Cuéntanos qué te pasa... que no follas ni pagando?