Hace 3 años | Por geralt_ a politicaexterior.com
Publicado hace 3 años por geralt_ a politicaexterior.com

En ‘The Craft’, el historiador John Dickie, hace plena justicia a lo que promete: explicar cómo los masones construyeron el mundo moderno. The Craft demuestra que es factible iluminar con la luz de la historia una institución sin la que es inexplicable la fundación de EEUU, el apogeo del Imperio británico, la desintegración del Imperio otomano o la descolonización de India en la posguerra. En Cuba, Fidel Castro nunca disolvió las logias de la isla por respeto a la militancia masónica de José Martí, el apóstol de la independencia.

Comentarios

D

La masonería inglesa ha sido muy buena para Inglaterra, y la española también.

P

Alguno muy amado tiene su propia masonería, y tampoco hay secreto,es la performance q se monta.
Ya me lo pongo yoclap

froidl_and_pablob

una ficción, una estafa, no hay secretos masonicos.
Humano demasiado humano que decía Nietzche.

geralt_

#2 En un panfleto de 1730, Masonry Disected, Sam Prichard ya había revelado todo lo que podía saber Coustos. El secretismo, en realidad, era un subterfugio para ocultar que no existía ningún secreto que ocultar. La leyenda secretista, como bien sabía Coustos, era más importante que los secretos mismos.
De una parte del artículo que, evidentemente, no has leído.

D

Es muy injusto para la democracia que haya sectas como esa o el Opus, y sean un peso importante en el devenir de los países. Todas tienen su decálogo de buenos principios, pero al final el beneficio y supervivencia de la organización está por encima de los intereses de los individuos que la componen. Y resulta que algunos de dichas personas ostentan cargos de primer nivel, como presidentes del estado, directivos de grandes empresas, etc. Si la organización le dice al líder lo que tiene que hacer lo hará, y en caso contrario hundirá su reputación hasta el fondo. Ayer en la tele vi un reportaje de la Cienciologia, y me llamó la atención un detalle cuando hablaban de que hundían la carrera de gente que abandonaba o se negaba a pagar. Resulta que la familia de Placido Domingo tenía ciertos problemas con esa logia, y echando cuentas coincide en las fechas en las que empezó el acoso mediático hacia esa persona. Quizás sea culpable, pero es llamativo que ocurra en ese momento.