Que alguien reconozca tu labor o tus virtudes es siempre de agradecer y a todos nos gusta recibir de vez en cuando un cumplido. Pero, por desgracia, detrás de muchos halagos hay un interés oculto, sobre todo cuando nos movemos en el fangoso entorno laboral. El éxito, hoy en día, sólo puede alcanzarse de forma colectiva, y depende principalmente de cómo interactuemos con la gente que nos rodea. Cuantos más amigos tengamos, más posibilidades tendremos de triunfar en el trabajo. Pero hay quienes reparten una gratitud impostada.
Comentarios
#0 Es muy loable el trabajo que haces en MNM, gracias por tus aportaciones.
¿Un parchis?
Quieren que les perdones
Eso son los mejores momentos.
Los trepas no descansan. Son tenaces y poco dados al desaliento. Da igual que hayan acabado peleándose con una persona, si van a necesitarla en el futuro harán lo posible por recuperar su confianza para luego, si es necesario, volver a clavársela por la espalda. Si has logrado desenmascarar a una persona manipuladora, por mucho que te adule, es mejor que seas precavido: si te la ha jugado una vez, puede jugártela muchas más.
Cuando te adulan temblando es cuando puedes comprobar la basura en la que se convirtieron. Pero nadie es perfecto, el mejor perdón, alejarse.
#2 Vale, vale, me pongo a estudiar.
#1 Pero aún así la gente les sigue votando.
En mi empresa nadie iguala mis datos de ventas, pero soy de los peores mirados por los jefes porque soy "el de las quejas".
Siempre estoy mirando que se puede mejorar y hablo con los jefes, les planteo los problemas, les hago los sempiternos DAFO's .... Y claro eso es molesto.
Los hay que no sacan casi ni para cubrir su sueldo , pero la manita en el hombro, la sonrisa y el SI ante todo y son el ojito derecho.
Me queda el consuelo de que dos veces al mes , cuando me voy de vacaciones y no estoy y cuando a fin de año se miran los resultados, mis jefes me aprecian un poco.
Si te sirve de consuelo yo hace muchos años trabajaba en eventos musicales y robaba hasta el tato menos yo, y era el peor visto con diferencia, no contaba conmigo nunca salvo que le hiciera mucha falta, en fin....menos mal que con su hija pase algunos buenos momentos