Una investigación desvela cómo el ex 'president' inventa la totalidad de su biografía. Fabula desde la causa de ruina de los abuelos paternos a las razones por las cuales su padre lo lleva al colegio alemán, pues recibió educación nazi. Con 12 años un psiquiatra le trató un 'grave trastorno', su papel siempre fue clave en los negocios de la familia, y contempló desde la cárcel la trama de evasión de divisas que engrasaba su padre... Los autores del libro 'Pujol: todo era mentira' nos lo adelantan.
Comentarios
Los pérfidos españoles le hacían la vida imposible cuando era pequeño, no le dejaban robar a los otros niños en el colegio, y sobre todo, había un andaluz, (que era un niño poco hecho, e inculto, como todos saben que somos los andaluces) que le robaba a él, lo que robaba a los otros niños catalanes y devolvía el dinero robado a esos niños, como un Robin Hood moderno, y eso le molestaba a Pujolcitó, pues un hombre inteligente, como él, cogería ese dinero y se lo llevaría a Andorra, por eso, cuando era mayor, trataba con desprecio a los andaluces.
Me parece bastante sensacionalista. El propio artículo se contradice cuando primero pone al padre como alguien que tienen beneficios escuálidos con sus negocios y luego relata negocios con cifras muy considerables para aquella época.
#1 si hubieras seguido leyendo habrías visto que cuando se lo montó bien fue a partir de los 40 años. Justo cuando empezaba la dictadura...
Pero Pujol fue un antifranquista incansable, ya sabes...
#5 Estuvo en la cárcel por ello
#6 y fue vicepresidente de un banco durante el franquismo también. Antifranquista de manual...
PD: el banco quebró
#1 Lo que afirma el artículo es que se cuenta de él que consiguió su fortuna en la bolsa, pero eso no se sostiene porque allí ganaba muy poco, y que en realidad sólo era una tapadera para los beneficios de sus verdaderos negocios. #5
El Mundo y Jordi Pujol .... dos fuentes de la más absoluta confianza.
Esta redactado como el culo ,no entiendo nada .
Jordi junior es clavado al abuelo
Es nuestro mangante y le queremos