Hay ocasiones en que un solo hecho es más recordado que todas sus consecuencias. Cuando eso ocurre, el tiempo no es más que una gota encerrada en una clepsidra y los recuerdos solo aparecen en viejos papeles. Sin embargo, por extraño que parezca, el devenir podría habernos enseñado que las palabras pueden convertirse en silencio cuando nadie es capaz de atribuirles un significado.
Comentarios
2014 será el año que morirán mis retinas por leer este articulo con ese fondo
No, en serio, con estas cosas no se bromean.
Recuerdo que cuando murió Keith Richards mi hermana y yo vimos a Hermida por la calle.