La lectura suele relacionarse siempre con los estudios de "letras" frente a "ciencias". Craso error, del que ya hemos hablado muchas veces. No insitiremos ahora. Pero es cierto que los estudiantes de bachillerato son los que suelen vivir de forma más dramática el problema de la lectura: es el momento del tránsito de la lectura "escolar" a la lectura como hábito; es el momento en el que las lecturas ya no solo pretenden diversión sino que sirven como pretexto para entender la historia de la literatura, de la filosofía, de la ciencia...
Comentarios
Yo no tuve suerte. Nada consiguió desengancharme del vicio y ahora pagaría por poder dejar de leer o, al menos, ser capaz de moderar el consumo. No creo que aporte nada bueno a un ser humano.
Por suerte ya hay profesores de asignaturas como matemáticas o música que recomiendan lecturas a sus alumnos, aunque tambien están los padres para quejarse de cuánto dinero se tienen que gastar en la educación de sus hijos.
Mi experiencia es que la gente de letras tiene tirria a las ciencias, pero la gente de ciencias sí es lectora.
En mi caso lo intentaron con Los Pazos de Ulloa, de Emilia Pardo Bazán. Casi lo consiguieron.
#1 En mi caso fue con El Gran Gatsby, de F. Scott Fitzgerald...vaya tostón, madre mía