Un joven investigador de origen afgano, aunque instalado en EE.UU., ha desarrollado un hormigón más resistente y ecológico que el convencional. Lo ha conseguido mediante el uso de restos derivados de la producción de bioetanol.
El producto no estaría mal, si no fuera porque la producción actual de bioetanol supone dedicarse a quemar productos que podrían usarse como alimento o como abono (para conseguir alimento)
Comentarios
Una excelente propuesta para el maximo aprovechamiento de los recursos
La verdad es que todo son ventajas.
El producto no estaría mal, si no fuera porque la producción actual de bioetanol supone dedicarse a quemar productos que podrían usarse como alimento o como abono (para conseguir alimento)
sale más mejor usar lo de siempre, ya sabes, egpain is diferent