Hace 11 años | Por deibitbanon a midietacojea.com
Publicado hace 11 años por deibitbanon a midietacojea.com

Una crítica hacia los métodos de enseñanza de algunos profesores. Se hace una comparación paso a paso entre la estructura de una clase de un "malcente" (por docente) y una misa, encontrando unas equivalencias cuando menos sorprendentes. El autor indica que no quiere que se entienda como una crítica generalizada a todos los docentes.

Comentarios

D

No, pero esta es la educación que está "bien" y que no hay que cambiar.

Shrike

#0 Un consejo. Para evitar que los talibanes te fusilen el envío por hacer microblogging en la entradilla, quizás fuese mejor que en esta copiases el primer párrafo del artículo

Cuando pedimos que el Malcente nos deje los apuntes en copistería no hacemos sino renunciar a nuestras labores de alumnado, el alumno se hace a golpe de muñeca, a roce de codo…

¡Dios! ¡Qué recuerdos! lol

D

#2 ¿Y eso?

Shrike

#3 En la carrera recuerdo esas clases magistrales donde el tipo se subía a la tarima y empezaba a dictar, de memoria eso sí, toda la clase con el mismo tono monocorde y pausado... Donde las preguntas debías hacerlas un minuto antes de terminar su recital, siendo la única respuesta la repetición casi exacta de lo que había dicho...

Afortunadamente, yo iba esquivando este tipo de profesores en medida de lo posible. O, al menos, me limitaba a fotocopiar los apuntes que algún conocido que ya hubiese hecho esa clase.

Tela, que recuerdos lol

D

#5 Yo tengo la teoría de que muchos profesores no tienen acceso aleatorio a su memoria. Sólo secuencial Por eso cuando les preguntas algo empiezan de cero otra vez lol

Shrike

#6 Esa teoría concuerda con el uso de tarjetones como chuletas; imagino que todos ellos estarán paginados, explicándose la naturaleza de su discurso/recital/sermón

deibitbanon

#2 Gracias, lo tendré en cuenta la próxima vez

D

A mi que en una Universidad pública se imparta la educación en base a una tradición cristiana no me parece mal, alla cada uno con su dinero. Ahora que en la Universidades públicas se enseñe continuamnete la religión marxista me parece deleznable.
Josdr, si quieren hacer proselitismo de sus creencias casi eligiosas que monten una universidad con su dinero y que vaya el que quiera. Que reciban una subvención a modo de ayuda porque en definitiva están dando educacion, funesta para mi funesta pero educación, y cada uno que elija lo que estine conveniente.