Juega con fuego y te acabrás quemando...juega con pistolas, escopetas y demás armas de fuego, y acabará ocurriendo una desgracia. Aunque en ocasiones, la suerte sonríe. Por lo menos eso es lo que tuvo que pensar el protagonista de este vídeo. El muchacho en cuestión se encontraba realizando unas prácticas de tiro sobre una diana; disparó su rifle, la bala rebotó en el suelo y acabó haciéndole saltar la gorra que llevaba puesta. De hecho, la bala le hizo una herida superficial en la cabeza.
Comentarios
De todas maneras, aunque le hubiera alcanzado en la cabeza no le habría dado en un órgano imprescindible para vivir.
Por eso los campos de tiro reglamentarios son de arena, no se permiten balas blindadas, y hay parabanes de madera por todos los lados
Eso le pasa POR CAPULLO
Eso es suerte y lo demás son tonterías...
¡Zas! ¡En toda la gorra!
jaja, vaya pringao