Hasta hace siete años Carsten Böhm, de 65 años, era acordeonista del popular grupo folclórico alemán Godewind. Hoy se sienta en el banquillo del tribunal de Lüneburg, en el estado federado de Baja Sajonia, acusado de haber abusado durante años de niños en Tailandia y de haber mantenido con ellos sexo sin protección en 403 ocasiones, a pesar de que sabía que tenía el virus del sida. 30 menores, y quizás más abusadores, podrían haber quedado infectados por el VIH.
Comentarios
Colgarlo es poco... así que la pena de muerte en este caso no vale... unas veces por mucho y otras por poco...
Cabronazo.
Estos hechos me producen mucha rabia y tristeza..
Joooooder.
En casos como este, yo estoy a favor de la lapidación.
Lo siento muchísimo por los niños, pero que se jodan el resto de pervertidos que abusaron de ellos después de que este degenerado les contagiara.
A la carcel con ese degenerado.
Pobres
Reflejo de la decadencia social que estamos viviendo.