Se trata de controlar a todos, sean o no funcionarios. Conozco muchisimos de casos de bajas fraudulentas. Conozco gente que sigue yendo a visitar al médico con un pollo en la mano para regalarlo. Conozco el caso de una mujer que lleva meses debaja porque su marido no la deja ir a trabajar porque cree que está liada con el jefe.
Conozco a otro que se enamoró de una compañera de trabajo y cuando ésta le dió calabazas se cogió tres mese de baja para no tener que verla.
Conozco a una enfermera de una mutua que pregunta a los pacientes si quieren la baja antes de que los vea el médico. Si dices que sí, te da la baja y ya te puedes ir a casa
¿Y por qué no controla el Gobierno a sus propios funcionarios? No creo que sea tan difícil evitar que los secretarios judiciales, por ejemplo, tomen baja cada dos por tres,y cuando "trabajan" se pasen hora y media tomando el café o yendo a la compra. Las empresas privadas ya se ocupan de deshacerse de los curritos caraduras, por motivos obvios. ¿Quién se ocupa de que nuestros impuestos no vayan a pagar salarios de holgazanes?
#5 Leyendo la noticia se deduce que se refiere a la empresa privada, ya que les preocupan las bajas de más de 15 días, o sea, a partir del momento en que se ocupa el Estado. No hacían falta tus aclaraciones, no te acusaría de funcionario, que no soy tan cruel . Y en este caso generalizo con fundamento, creo. Viví 10 años en Santiago y a media mañana era un "chou" ver los funcionarios de la Xunta en comitiva a la cafetería. Y no la más cercana, precisamente, para luego volverse dando un agradable paseo. Y luego el Ayuntamiento propuso incentivos...¡a los que no se ausentasen del trabajo! Increíble, pero cierto. En el caso de la Justicia, ya es más sangrante todavía, porque trabajan sólo de mañana. Jornada de 40 horas semanales en funcionarios, YA. Digo.
La desverguenza es total. Después de años perdiendo poder adquisitivo, soportando unas condiciones laborales cada vez peores en términos de contratación y de legislación clara sobre aspectos como el acoso moral y padeciendo unos horarios que hacen directamente imposible cualquier intento de conciliar vida laboral y familiar/personal, después de que sindicatos y PSOE hayan estado bien calladitos sobre todos esos problemas del trabajador, resulta que salen con que van a controlarnos las bajas repetidas de uno o dos días por si acaso es que estuvieran delante de vagos caraduras.
Eso sí, nada de plantearse los más que posibles motivos de esas bajas. Por ejemplo, ¿es culpable un trabajador acosado que no tiene más remedio que buscar algún día de escape para serenar su estado de ánimo? Porque hay que saber que con la ley en la mano es casi una entelequia intentar demostrar que se está ante una situación de acoso. Los medios de prueba admitidos son tan ridículos que convierten en imposible la prueba (por ejemplo, no se admite siempre algo tan básico como las grabaciones), pero el trabajador que la padece ve como su salud moral y física va siendo seriamente mermada por esa situación y, muchas veces, no le queda ninguna otra solución que recurrir a lo que en baloncesto se llama tiempo muerto, porque si no, el muerto sería él mismo.
¿es culpable de tomarse un día de respiro un trabajador sometido a un trabajo rutinario y agotador? ¿No estaríamos en realidad ante una patología que nuestros queridos legisladores y empresarios no quieren ni siquiera plantearse que exista en la realidad?
¿Qué decir de esos horarios en jornada partida que ocupan a una persona desde las ocho mañana o antes en que sale de su casa hasta las ocho de la tarde o después cuando llega? ¿Dónde encuentra tiempo para su familia, o para sus amigos o para comprar una camisa o para recibir al fontanero o al electricista...? De nuevo estamos ante una situación que solo tiene la solución de buscar algún día libre, aunque sea recurriendo a un imaginario dolor de cabeza o resfriado. ¿Por qué no se legisla sobre esos horarios endemoniados y se protege al trabajador en vez de al empresario?
Además, esa vigilancia sólo se ejercerá sobre el personal que no tiene más remedio que recurrir a la enfermedad imaginaria o a la baja médica, porque quedarán fuera de esa supervisión todos los responsables de medio pelo de la empresa para quienes el único problema a la hora de ausentarse es alegar alguna reunión/visita fuera de la empresa o para los enchufados a los que ni siquiera les será necesario inventar excusa alguna, ya que nadie les preguntará dónde estuvieron el viernes o el lunes. Por supuesto, tampoco va con los funcionarios que fichan y se van de compras o de paseo mientras los administrados nos vemos sometidos a larguísimas colas y trámites que tardan mucho más de lo razonable; tampoco con los políticos que no hacen nada de nada y que encima tienen toda clase de prebendas y ventajas salariales y sociales, con pensiones máximas de por vida por solo desempeñar el cargo unos meses o unas horas, que según la ley lo mismo da, y con sueldos de ex compatibles con toda clase de percepciones salariales públicas y privadas.
Daría la impresión de que ya son tantos los que chupan del bote, del bote que llenamos los curritos con nuestros impuestos, que se han visto en la obligación de estrechar bien la vigilancia sobre los paganos de la fiesta, no sea que alguno pague menos de lo debido o le dé por tomar alguna minúscula migajita en forma de día libre de su gigantesca tarta en forma de tocarse las narices durante toda su vida pero con un sueldo fabuloso.
Nos quitaron el tiempo, luego nos recortaron el dinero, nadie reclamó ni reclama ni reclamará nada por ello y ahora vienen a quitarnos las pobrísimas ventajas que algún día tomamos en forma de enfermedad imaginaria de un día y para las que, al contrario de ellos, nos vemos obligados a recurrir a la mentira y sufrir un innecesario sentimiento de culpabilidad. Por cierto, ¿alguien les ha dicho a los políticos que la Seguridad Social la pagamos principal y precisamente los que tomamos esas bajas? ¿alguien les ha dicho que sus pensiones y multi salarios compatibles con todo los pagamos nosotros? ¿alguien les ha dicho a los sindicalistas que sus cómodos sillones también salen de nuestros bolsillos?
Comentarios
#1 Pues sí, porque
El 22% de los empleados públicos falta al trabajo a diario en la Comunidad de Madrid
El 22% de los empleados públicos falta al trabajo ...
20minutos.esUn policía para 75.000 ciudadanos y el 40% de la policía local de "baja médica" en Semana Santa
Un policía para 75.000 ciudadanos y el 40% de la p...
lavozdegalicia.esSe trata de controlar a todos, sean o no funcionarios. Conozco muchisimos de casos de bajas fraudulentas. Conozco gente que sigue yendo a visitar al médico con un pollo en la mano para regalarlo. Conozco el caso de una mujer que lleva meses debaja porque su marido no la deja ir a trabajar porque cree que está liada con el jefe.
Conozco a otro que se enamoró de una compañera de trabajo y cuando ésta le dió calabazas se cogió tres mese de baja para no tener que verla.
Conozco a una enfermera de una mutua que pregunta a los pacientes si quieren la baja antes de que los vea el médico. Si dices que sí, te da la baja y ya te puedes ir a casa
¿Y por qué no controla el Gobierno a sus propios funcionarios? No creo que sea tan difícil evitar que los secretarios judiciales, por ejemplo, tomen baja cada dos por tres,y cuando "trabajan" se pasen hora y media tomando el café o yendo a la compra. Las empresas privadas ya se ocupan de deshacerse de los curritos caraduras, por motivos obvios. ¿Quién se ocupa de que nuestros impuestos no vayan a pagar salarios de holgazanes?
#5 Leyendo la noticia se deduce que se refiere a la empresa privada, ya que les preocupan las bajas de más de 15 días, o sea, a partir del momento en que se ocupa el Estado. No hacían falta tus aclaraciones, no te acusaría de funcionario, que no soy tan cruel
. Y en este caso generalizo con fundamento, creo. Viví 10 años en Santiago y a media mañana era un "chou" ver los funcionarios de la Xunta en comitiva a la cafetería. Y no la más cercana, precisamente, para luego volverse dando un agradable paseo. Y luego el Ayuntamiento propuso incentivos...¡a los que no se ausentasen del trabajo! Increíble, pero cierto. En el caso de la Justicia, ya es más sangrante todavía, porque trabajan sólo de mañana. Jornada de 40 horas semanales en funcionarios, YA. Digo.
A ves si lo aplican en las cortes... Diputados y parlamentarios.
#1: Creo que los funcionarios están incluidos.
Por cierto, la generalización es la madre de males como el racismo y la xenofobia. No caigas en ella.
Aclaraciones que me conozco el percal:
1: No, no te estoy llamando racista ni xenófobo.
2: No, no soy funcionario.
La desverguenza es total. Después de años perdiendo poder adquisitivo, soportando unas condiciones laborales cada vez peores en términos de contratación y de legislación clara sobre aspectos como el acoso moral y padeciendo unos horarios que hacen directamente imposible cualquier intento de conciliar vida laboral y familiar/personal, después de que sindicatos y PSOE hayan estado bien calladitos sobre todos esos problemas del trabajador, resulta que salen con que van a controlarnos las bajas repetidas de uno o dos días por si acaso es que estuvieran delante de vagos caraduras.
Eso sí, nada de plantearse los más que posibles motivos de esas bajas. Por ejemplo, ¿es culpable un trabajador acosado que no tiene más remedio que buscar algún día de escape para serenar su estado de ánimo? Porque hay que saber que con la ley en la mano es casi una entelequia intentar demostrar que se está ante una situación de acoso. Los medios de prueba admitidos son tan ridículos que convierten en imposible la prueba (por ejemplo, no se admite siempre algo tan básico como las grabaciones), pero el trabajador que la padece ve como su salud moral y física va siendo seriamente mermada por esa situación y, muchas veces, no le queda ninguna otra solución que recurrir a lo que en baloncesto se llama tiempo muerto, porque si no, el muerto sería él mismo.
¿es culpable de tomarse un día de respiro un trabajador sometido a un trabajo rutinario y agotador? ¿No estaríamos en realidad ante una patología que nuestros queridos legisladores y empresarios no quieren ni siquiera plantearse que exista en la realidad?
¿Qué decir de esos horarios en jornada partida que ocupan a una persona desde las ocho mañana o antes en que sale de su casa hasta las ocho de la tarde o después cuando llega? ¿Dónde encuentra tiempo para su familia, o para sus amigos o para comprar una camisa o para recibir al fontanero o al electricista...? De nuevo estamos ante una situación que solo tiene la solución de buscar algún día libre, aunque sea recurriendo a un imaginario dolor de cabeza o resfriado. ¿Por qué no se legisla sobre esos horarios endemoniados y se protege al trabajador en vez de al empresario?
Además, esa vigilancia sólo se ejercerá sobre el personal que no tiene más remedio que recurrir a la enfermedad imaginaria o a la baja médica, porque quedarán fuera de esa supervisión todos los responsables de medio pelo de la empresa para quienes el único problema a la hora de ausentarse es alegar alguna reunión/visita fuera de la empresa o para los enchufados a los que ni siquiera les será necesario inventar excusa alguna, ya que nadie les preguntará dónde estuvieron el viernes o el lunes. Por supuesto, tampoco va con los funcionarios que fichan y se van de compras o de paseo mientras los administrados nos vemos sometidos a larguísimas colas y trámites que tardan mucho más de lo razonable; tampoco con los políticos que no hacen nada de nada y que encima tienen toda clase de prebendas y ventajas salariales y sociales, con pensiones máximas de por vida por solo desempeñar el cargo unos meses o unas horas, que según la ley lo mismo da, y con sueldos de ex compatibles con toda clase de percepciones salariales públicas y privadas.
Daría la impresión de que ya son tantos los que chupan del bote, del bote que llenamos los curritos con nuestros impuestos, que se han visto en la obligación de estrechar bien la vigilancia sobre los paganos de la fiesta, no sea que alguno pague menos de lo debido o le dé por tomar alguna minúscula migajita en forma de día libre de su gigantesca tarta en forma de tocarse las narices durante toda su vida pero con un sueldo fabuloso.
Nos quitaron el tiempo, luego nos recortaron el dinero, nadie reclamó ni reclama ni reclamará nada por ello y ahora vienen a quitarnos las pobrísimas ventajas que algún día tomamos en forma de enfermedad imaginaria de un día y para las que, al contrario de ellos, nos vemos obligados a recurrir a la mentira y sufrir un innecesario sentimiento de culpabilidad. Por cierto, ¿alguien les ha dicho a los políticos que la Seguridad Social la pagamos principal y precisamente los que tomamos esas bajas? ¿alguien les ha dicho que sus pensiones y multi salarios compatibles con todo los pagamos nosotros? ¿alguien les ha dicho a los sindicalistas que sus cómodos sillones también salen de nuestros bolsillos?