Hace 16 años | Por Repiqueteo a lavozdegalicia.es
Publicado hace 16 años por Repiqueteo a lavozdegalicia.es

(C&P) La Iglesia que firmó los concordatos con Hitler, Mussolini y Franco, y que mantuvo sus capellanes en las cárceles del horror y en los campos de exterminio, se escandaliza ahora porque el Gobierno trate de negociar la paz con ETA. La Iglesia que no es capaz de condenar la pena de muerte, que la mantiene en su catecismo oficial, y que salva la cara pidiendo que no se aplique donde ya no se aplica, pero que jamás denuncia el atroz escenario penal norteamericano, nos viene ahora con la monserga indecente del «orden moral objetivo»...

Comentarios

Astarkos

En cambio, la izquierda que pactó alegremente con Hitler, denominando sus crímenes 'lucha entre burgueses', hasta la invasiónn de Rusia, ha demostrado ser mucho más coherente.

Rober_Top

En los tiempos en los que estamos, parece mentira que estos "personajes trasnochados" intenten insultar nuestra inteligencia de la misma forma que lo han estado haciendo durante siglos. La diferencia está en que ahora estamos más formados y sabemos que la religión es un fraude "inventada" para manipular al vulgo y conseguir el poder. Ya pueden empezar a modernizarse e inventar otro método de manipulación pues éste está absolutamente pasado de moda. Pero lo mejor es que intenten unirse a la corriente de libertad y democracia que empieza a inundar el mundo y donde no caben los "mentirosos manipuladores".

foxlow

la paz sea contigo, hermano, yo te absuelvo

arielleira

O dicho de otra manera: El débil no siempre negocia pero siempre es el que pide negociar. Con quien haga falta. A la vista está.

arielleira

¿Dónde está el paralelismo entre los concordatos y la negociación con la ETA? ¿Es acaso el gobierno de España una asociación religiosa? ¿Son los de la ETA quienes en realidad gobiernan España?

La negociación de los concordatos se hizo a instancias de una asociación religiosa que tenía propiedades, actividades, y sobre todo miembros, sometidos al poder de la otra parte negociadora. Espero que no esté aquí el paralelismo con la negociación del gobierno.